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Domingo 15 de enero de 2017

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Cultural El Duende

Zurita y Bolaño

15 ene 2017

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En 2014, el poeta chileno Sergio Rodríguez le preguntó a Raúl Zurita: ¿Qué opinión te merece Bolaño, cuál es tu relación con él? Y Zurita respondió: "La nuestra ha sido una relación póstuma; Bolaño acuñó su famoso Literatura + enfermedad = enfermedad. Bello, la única lástima es que es una fórmula equivocada: Literatura + enfermedad = muerte, como el mismo Bolaño no podría ahora más que corroborarlo. Sí, claro, él tomó la imagen de mi poema escrito con aviones en el cielo en Estrella distante, el hecho me entusiasmo mucho, no creo en la propiedad sobre la creación artística, y corrí a comprar el libro.

Fue una desilusión, las frases que escribió en el cielo eran cosas obvias, grandilocuentes, sin tensión, donde yo ponía "Mi Dios es Hambre", wooww, tremendo, él ponía "La muerte es limpieza", una lata, y para parodiarme Bolaño tendría que haber escrito mejor que yo y Bolaño no escribe mejor que yo. Pero tampoco fue eso, lo que realmente me liquidó es que Bolaño no tenía idea: escribir con un solo avión las frases que su personaje escribía en el cielo es absolutamente imposible, y el piloto habría vomitado hasta el estómago con tanto giro, se necesitaban cinco aviones.

Los poemas de Roberto Bolaño eran como su gaucho: insufribles, pero también lo eran los poemas de William Faulkner, y William Faulkner llegó a ser William Faulkner, como Roberto Bolaño llegó a ser Roberto Bolaño, es decir, fueron dos de los más extraordinarios escritores de sus respectivas tradiciones literarias.

Lo que quiero decir es que si escribir poesía verdaderamente te importa, no lograr escribir un poema mínimamente pasable, produce un sentimiento tal de fracaso e inutilidad que, o arruinas tu vida llenándote de resentimiento o escribes 2666, esa novela cumbre de nuestro tiempo, que carga con un problema central sin solución intermedia: o le sobraron ochocientas páginas o le faltaron ochocientas páginas, pero de la que igual sales boqueando. Lamento que no haya vivido más. Muchas veces mientras escribía Zurita me vi pensando en él.

Se fascinó con Nicanor, pero al que le copió fue a mí. Yo también le copié. Realmente me apena que no nos hayamos dado el tiempo de ser amigos.

Tal vez a él le era más fácil así, Qué puede importar ahora".

Raúl Zurita.

Poeta chileno, 1951.

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