Campañas de un momento

Cuando llegó el Dakar a Bolivia, que recorrió los departamentos de Potosí, Oruro y La Paz, se desató una campaña para cuidar a los animales, especialmente a los canes que pudieran andar cerca de la ruta del rally, puesto que por la velocidad que imprimen los pilotos a sus máquinas, no es posible detenerse, por lo que muchos animales mueren atropellados.

La campaña difundida a través de las redes sociales llamaba a las personas de buen corazón, que estuvieran en inmediaciones de la ruta del Dakar, que salvaran la vida de los animales que corrieran peligro, y que no se deje salir de las casas a los domésticos.

Sin embargo, miles de animales mueren cada día en las carreteras del país, cuando apresurados viajeros no alcanzan a frenar ante la presencia de algún can, toro, vaca, llama, oveja u otro, algunos de ellos quedan tiesos al costado del camino, otros son repasados una y otra vez hasta que llegan a formar parte del asfalto.

Algunos internautas observaban que cuando llega Carnavales, comienzan las campañas para prevenir el derroche de agua, pero el resto del año, el líquido elemental puede ser desperdiciado sin que nadie diga nada, es más, cuando hay un reventón de cañerías, la solución suele llegar tarde, mientras se pierden litros y litros de agua.

Cuando llega San Juan se prohíbe el encendido de fogatas, días antes comienza la campaña de concienciación y, esa misma noche del 23 de junio y en la madrugada del 24 se hacen batidas de control, para evitar que la norma sea transgredida, pero días después nadie dice nada acerca de los chaqueos que destruyen la biodiversidad y el ecosistema, registrándose el año pasado 23.000 focos de calor a nivel nacional.

Sólo cuando alguien llega a criticar, y lo hace públicamente, por la basura, todos se rasgan las vestiduras y se organizan campañas de limpieza, pero el resto del año las personas inclusive ensucian las calles botando en ellas envoltorios y envases de todo tipo, u otra clase de basura, dejándolas incluso con olores fétidos y convirtiéndolas en focos de infección.

Por todo esto es importante encarar las campañas de manera planificada, asignándoles recursos para que sean permanentes y analizando una fuente de captación de dinero, para que también sean sostenibles y sustentables en el tiempo, y las llamadas a hacer todo ello son las autoridades que los ciudadanos eligen como representantes, no obstante, la población no debe quedar al margen, todos debemos contribuir con nuestro granito de arena por el bien de nuestro hábitat y si cada uno tomara conciencia de a poco se podrían eliminar las campañas.

Fuente: LA PATRIA