Jueves 13 de mayo de 2010
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Las preguntas de los discípulos sobre el significado de la parábola del sembrador, fueron solo el principio. Las que se referían al por qué del anuncio a los pecadores, a los asuntos celestiales y al momento cumbre del retorno al Padre, fueron tantas y diversas que la respuesta tuvo que ser simplemente de consuelo:
-Comentaron algunos discípulos: “¿Qué significa eso de: dentro de poco ya no me verán, pero poco más tarde me volverán a ver, y eso de: me voy con el Padre? ¿Qué significa ese: poco? No entendemos lo que dice”.
-“Comprendió Jesús que querían preguntarle y les dijo: ¿Están discutiendo de eso que les he dicho: Dentro de poco ya no me verán, pero poco más tarde me volverán a ver? Pues sí, les aseguro que llorarán y se lamentarán ustedes, mientras el mundo estará alegre; ustedes estarán tristes, pero su tristeza se convertirá en alegría”.
¿Cual fue el momento de la alegría? La resurrección y la venida del Espíritu Santo, y como dijo nuestro Salvador, las mentes se despejaron y el camino del anuncio del reino quedó llano: los discípulos salieron en todas direcciones y la presencia divina fue portentosa.
Fuente: LA PATRIA
