Apelan fallo de juez por caso de agresión a personeros del COA

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El favorecimiento con medidas sustitutivas para cinco personas que agredieron a funcionarios del Control Operativo Aduanero (COA), fallo emitido por el juez Sandro Quezada, fue apelado ayer por el Ministerio Público. Consideró que la autoridad jurisdiccional no tomó en cuenta los riesgos procesales en la audiencia cautelar realizada la noche del viernes precedente.

La fiscal de Distrito, Dubeysa Palacios, manifestó ayer que existieron observaciones a la decisión del juez, ya que los aprehendidos y posteriormente imputados, fueron partícipes del hecho ocurrido en Pisiga la madrugada del jueves 8 de diciembre.

"En conocimiento del caso, hemos nombrado una comisión de dos fiscales. En ese sentido, ellos presentaron una imputación formal por varios delitos, amenazas, daño al patrimonio del Estado, entorpecer el trabajo del ejercicio de la función pública y fundamentalmente el delito del contrabando. Se aprehendió a una en flagrancia y a otras cuatro que fueron devueltas (por Carabineros), quienes participaron en el hecho", manifestó.

Aquellos aspectos se hicieron conocer en la audiencia cautelar del viernes por la noche, sin embargo, extrañamente, para la fiscal Palacios, el juez de turno, Sandro Quezada, tomó la decisión de asumir las medidas sustitutivas para los involucrados.

"Una audiencia cautelar determina dos elementos, que con probabilidad sea autor o partícipe del hecho y los riesgos procesales. En este caso, los riesgos procesales existían, el amedrentamiento a los funcionarios del COA, el haber escapado al país vecino después del hecho, el haber destrozado patrimonio del Estado y tener antecedentes. O sea, ya un riesgo de fuga, pero el juez dispuso medidas sustitutivas y el Ministerio Público presentó hoy (ayer) la apelación", explicó.

Afirmó que se esperará el resultado de la apelación para tomar decisiones penales como administrativas, ya que no se puede dejar en la impunidad ese tipo de hechos.

ANTECEDENTES

El miércoles por la noche, personal del COA en un camino vecinal cerca de Pisiga encontró un camión encunetado con mercadería de contrabando. Al notar la presencia policial, tres personas escaparon. La madrugada del jueves se hizo presente personal de Carabineros con la supuesta dueña de la mercadería.

Se les explicó cuál era el procedimiento en Bolivia y se fueron a su sector. Instantes después unas 40 personas se aproximaron a la zona donde estaba encunetado el camión cuando los uniformados del COA fueron hostigados, amenazados de muerte y su vehículo sufrió destrozos. Ahí lograron aprehender a la supuesta dueña.

Como no tenían elementos para reprimir se fueron en busca de apoyo de la Policía y cuando volvieron no encontraron el camión, pero sí la mercadería de contrabando que estaba desparramada por el lugar. El camión había sido trasladado a Chile.

Más tarde unas 14 personas fueron devueltas por Carabineros hasta la frontera, de los cuales sólo cuatro pudieron ser atrapadas por los funcionarios del COA y luego trasladadas hasta la ciudad de Oruro en calidad de aprehendidos.

Fuente: LA PATRIA