Sábado 10 de diciembre de 2016
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En los adolescentes un examen médico genital se convierte en un escenario conflictivo y peor aun cuando no se ha logrado la confianza con ellos. En la mayoría de los casos cuando no se efectúan el examen, pierden la oportunidad de concretarlo y llega a perjudicar su salud o complicaciones en su estado.
Principalmente, los adolescentes deben estar preparados para un primer examen, una orientación previa ayudará en obtener la confianza adecuada.
Por la presencia de muchos casos del cáncer cervicouterino y las infecciones de transmisión sexual en adolescentes, es necesario que un examen tenga un equilibrio entre la no agresión y la pérdida de oportunidades para llegar a un diagnóstico y su tratamiento.
Los adolescentes tienen que colaborarse en forma activa y prepararse para este tipo de exámenes de exploración, además de tener un conocimiento permanente de cualquier alteración que se sufra. No se olvide que principalmente la mujer adolescente activa sexualmente, requiere del examen ginecológico y realizarse el Papanicolaou que descarte una infección o el inicio de posible cáncer.
