Cuántos cientos de estos comerciantes están ubicados en las calles?, Esa es como alguien dijera, la pregunta del millón, aunque sà de cantidad se trata, seguramente nos quedamos cortos para establecer una cantidad lo más aproximada a la incursión de personas en el comercio callejero, cualquiera sea este, pero que ocupa cierto espacio en las vÃas públicas.
Es el comercio informal, siempre de crecimiento desordenado, caótico por sus caracterÃsticas, pero se dice, con cierto beneficio directo y diario para las arcas municipales y extra control, para algunos funcionarios públicos que hacen de la "vista gorda", ante el crecimiento de un mercado irregular callejero que "paga lo que puede" para sobrevivir en las calles.
Quienes observan este asunto, aseguran que la AlcaldÃa no tiene un registro de comerciantes "informales" que se aproxime a la realidad de lo que realmente constituye este sector, en permanente crecimiento y mientras persistan ciertas condiciones sociales sin posibilidades de que se detenga su avasallamiento de la vÃa pública y los espacios de los transeúntes.
Cuántos son realmente los comerciantes informales, gremiales y algunos eventuales que proliferan en las calles? Es otra interrogante sin respuesta oficial en el nivel que ejerce control sobre el rubro y que es parte de la AlcaldÃa, que se encarga de cobrar el impuesto por sitio "sentaje" como lo llaman y que multiplicado por los centenares de comerciantes, significa un importante ingreso para el Tesoro Municipal, sin contar, cartas y espadas, de buen número de comerciantes que transitan y eluden el pago por sitio que ocupan.
Por supuesto que la otra cara de la medalla en este asunto, corresponde a la situación de empleo, la carencia de fuentes de trabajo seguro, se suple con un negocio callejero que genera utilidades y hasta permite que el negocio vaya creciendo con el movimiento de más mercaderÃa o productos alimenticios, baratijas, ropa y zapatos que se ha hecho costumbre venderlos en las ferias a las que concurre enorme cantidad de gente, que paga menos y hasta tiene un muestrario en oferta de los productos más inverosÃmiles que se tenga idea, pero que se venden en las calles y solucionan problemas de precio y de gustos para mucha gente.
Pero en la parte formal, este hecho "social", como lo admite el Estado, tiene más puntos negros de los aparentemente visibles, como la abierta evasión impositiva, el uso irregular del espacio púbico, la competencia en precio y calidad, ambos más bajos que la producción nacional, por lo que se vende más la mercaderÃa de contrabando y se deja la que se fabrica en casa.
El problema hay que tomarlo con mucha seriedad y a la luz de una realidad que no puede menos que alarmarnos, porque ya no sólo salva la carencia de empleos y las limitaciones de algunos hogares, hoy el asunto se ha convertido en una abierta y desleal competencia con la industria y el comercio nacional, además con una resta inimaginable de ingresos tributarios para el paÃs. Se da el caso que los comerciantes informales, manejan inmensos capitales y desarrollan sus tareas camuflados en puestos callejeros incumpliendo abiertamente las normativas vigentes. Un problema que debe ser reparado empezando por un censo de comerciantes.
Fuente: LA PATRIA
Para tus amigos:
¡Oferta!
Solicita tu membresÃa Premium y disfruta estos beneficios adicionales:
- Edición diaria disponible desde las 5:00 am.
- Periódico del dÃa en PDF descargable.
- FotografÃas en alta resolución.
- Acceso a ediciones pasadas digitales desde 2010.