Loading...
Invitado


Domingo 04 de diciembre de 2016

Portada Principal
Revista Dominical

Prólogo al ensayo de Raúl Pino-Ichazo Terrazas, "La muerte"

04 dic 2016

¿Fotos en alta resolución?, cámbiate a Premium...

Con el mayor gusto y cariño me permito poner unas líneas al nuevo libro del conocido escritor, prestigioso abogado, catedrático universitario, Doctor Honoris Causa, actualmente Presidente de la Sociedad de Escritores, Dr. Don Raúl Pino-Ichazo Terrazas.

Este valioso libro es la meditación personal, sobre el tema de la muerte, escrito por un importante intelectual de nuestro medio. Tema difícil de entender, y más difícil de aceptar por lo especial de un asunto que, tarde o temprano, todos los seres humanos tenemos que afrontar, pero al cual le damos vueltas y vueltas, huyendo del toro sin atrevernos a tomarlo por los cuernos. Raúl Pino -Ichazo, sí se ha atrevido a hacerlo, y por eso, es uno de los pocos escritores en el mundo que tiene una obra sobre asunto tan difícil.

Como dice tan acertadamente el autor, "se toma conciencia de la muerte en la muerte del otro" y no en la propia, primero porque no la conocemos, segundo porque no nos atrevemos a mirarla de frente, tercero porque, a veces la vida nos sacude al saber que un ser querido: padre, madre, hijo, hermano o amigo muy próximo ha muerto, dejando un hueco, que muchas veces es un abismo hondo y oscuro, en nuestra vida, y nos ha quitado un pedazo de nosotros mismos, con la fuerza del que, al caer en el hueco del no existir, se sujeta del que tiene a su lado, y le hace tambalear al borde del precipicio, dejándonos con el asombro del misterio, con el vacío del que no puede pensar, puesto que le han tapado los ojos y le han quitado el aire.

La muerte, nos dice la gente, es la otra cara de la vida, la que se oculta en lo oscuro, la que se abre al espíritu, la que nos conecta más rápida y directamente con Dios, el amor por excelencia. Por eso, de acuerdo con Raúl Pino-Ichazo Terrazas, "la muerte es retornar a la unidad del espíritu", a unirnos con ese amor inefable e inacabable que sale del espíritu más puro y más perfecto que es Dios, quién seguramente nos abraza con fuerza en ese instante, para no soltarnos más de sus manos invisibles, y tenernos así por la eternidad de la eternidad. Por eso, vida-muerte son un eje cuya punta no sabemos dónde está, como no sabemos cuál de las puntas de una barra está en nuestras manos al tomarla, dejarla y volverla a agarrar, para hacer el trabajo de palanquear algo, en este caso a nuestra mente para comprender lo que es la muerte o lo que es la vida.

Raúl Pino-Ichazo Terrazas se ha tomado el trabajo de investigar el tema de la vida y de la muerte, a tal punto que hay citas de importantes pensadores y poetas como Goethe sobre estos temas, y no solo escritores, sino también científicos pues esos asuntos interesan a todos, y a todas las disciplinas mentales.

Para comprender este tema debemos colocarnos, con asombro, con humildad y rectitud de corazón, ante el misterio de la existencia y prepararnos a verla en sus múltiples facetas, la vida vegetal, la vida animal, la vida intelectual y psicológica, la vida del alma y del espíritu, y además poder mirar la otra cara de esta realidad, la que se deshace, la que se pudre, la que se pierde en los múltiples senderos del misterio, cerrando el círculo de la única existencia, y nos deja anonadados. Y además, como nos dice el autor de este libro, a no quedarnos en lo superficial, en la marea de la vida práctica y cotidiana que nos quita la verdadera visión de lo que es la vida misma, al producir las olas de las preocupaciones y los problemas del cada día; no, en ese ambiente nos perdemos en las ramas, y no entramos en el tronco y las raíces del árbol mismo. Pero esa visión de la vida es la que tenemos la mayoría de las personas de hoy en día, y las de todos los tiempos. Para entrar es ese tema hay que prepararnos a ingresar en el universo del espíritu, porque "sólo el espíritu es capaz de autocontrolarse", como escribe Raúl Pino-Ichazo Terrazas, y, para entrar en el espíritu hay comprender la importancia de la oración, no la que nos llena los labios con palabras automáticas mientras pensamos en otra cosa, sino la verdadera oración, la que sale del corazón, del alma de nuestra vida en pos de conversar y unirnos con Dios, para dialogar con él, para comunicarnos lo más íntimamente posible con el Creador.

Felicito al escritor y abogado, al pensador, como al investigador Raúl Pino-Ichazo Terrazas por regalarnos un libro más de su autoría. Un libro que nos hace pensar, y enriquece a la literatura de nuestro país.

Por: Lic: Patricia Collazos Bascopé - Presidenta Vitalicia de la Sociedad de Arte de Bolivia

Para tus amigos: