Sábado 26 de noviembre de 2016
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La Pachamama o la madre naturaleza, como sea nuestra concepción del medio ambiente se comportó como toda madre, sabia y llena de experiencia, nos previno respecto a la crisis del agua que se venía venir (incluso a nivel internacional) y nosotros como buenos hijos carentes de experiencia no hicimos caso, hasta que por las malas tuvimos que aprender.
Despilfarramos el líquido elemento de forma muy irresponsable y alarmante, lavamos nuestros autos, aceras y hasta la calle con agua potable, tomamos duchazos que duran de 20 a 40 minutos, cuando tenemos fuga en nuestras cañerías esperamos el fin de semana para que pueda ser reparado, porque en la semana trabajamos, pasaríamos describiendo n comportamientos que se asemejarían a los multimillonarios de países desarrollados.
La población paceña sufrió de tal manera la crisis, que empezamos a inventar e imaginar, sobre todo en las redes sociales y en el boca a boca, acciones inexistentes por ejemplo mostramos fotos de una empresa China que estaba carcomiendo las entrañas de nuestro querido Illimani, afirmábamos y aseguramos que gran parte del agua almacenada de la represa de Jampaturi era desviado por esta empresa (inexistente) para realizar la explotación minera y a consecuencia de dicha acción nuestra ciudad carecía de agua.
