El arte narrativo de Teresa Constanza

Libros como Noche de fragancias, escrito por Teresa Constanza Rodríguez Roca y publicado por Correveidile, reflejan la dimensión literaria de escritores de reconocida categoría. Su valor se duplica al enfocar temas desde el punto de vista de la escritora que ha dedicado toda una vida al arte y a pulir palabras e imágenes para consolidarlas en obras literarias. La autora, nacida en Santa Cruz de la Sierra, se ha graduado como profesora de español e inglés en la Normal Superior Nacional Católica de Cochabamba. Formó parte de talleres literarios en Buenos Aires, México y Madrid. Ha publicado en revistas de Bolivia, Chile, México, entre otros. En 2004 ganó el Premio Nacional de Cuento en Potosí con La víbora y en 2005 publicó el libro de cuentos Función privada. En 2013 fue finalista del Premio Nacional de Cuento Adela Zamudio. Los dos libros tienen portada femenina, con el supuesto protagonismo de la mujer en su faceta particular; sin embargo sus relatos tienen voces variadas: del niño hijo de mamá, la novia, el santo, el loco o la despechada, que protagoniza el cuento que lleva el título del libro Noche de fragancias; en fin, voces que hablan por sí mismas, desde la distancia del que observa o en la cercanía del tú a tú, pero con la mirada y pulso creador de la narradora. Teresa Rodríguez Roca recorre caminos narrativos paso a paso. Nos introduce en prados cotidianos con fragancias de la tierra y en ella se desliza sin reparos porque el espacio y los personajes que la habitan son de su dominio. Aunque pisa terrenos conocidos y el lector siente que está a su aire, la sorpresa espera a la vuelta de la esquina, con saltos prospectivos y retrospectivos, a veces desesperantes como en el cuento Escogido por las diosas, que traslada al personaje a un mundo de ciencia ficción o en Presa del instante, cuyo personaje pasa el límite de la cordura en un giro sin posibilidad de retorno. A veces el motor de la acción progresa en el pensamiento de sus personajes como en Expreso doble que viven intensamente dentro de sí una historia paralela y, que a pesar de la cercanía, sus vidas no se encuentran, pero la tensión vibra en cada palabra. Isoglosa es una estampa deliciosa del cuento breve moderno, la escritora ajusta las cuerdas temporales y lingüísticas en salto prospectivo con precisión matemática. No necesita más palabras para diseñar la línea que conduce al punto de conmoción final. Teresa conoce los entresijos de la estructura del cuento y las técnicas narrativas contemporáneas. Trabaja las secuencias narrativas ajustando velocidad y ritmo con la precisión de un vuelo de alto riesgo; es más, su capacidad narrativa se manifiesta tanto en lo breve como en el cuento de siempre con estratégica diversidad estilística que evita encasillarla en moldes clásicos. Los cuentos de Teresa Constanza Rodríguez trascienden sentidos y mundos diversos en clara muestra de la seguridad del conductor profesional de motores lingüísticos y estéticos. Su lectura atrae, gusta y poco a poco atrapa irremediablemente en las redes de tensión hacia un desenlace en explosión de relajamiento, sorpresa o desconcierto.

Leer más