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Sábado 19 de noviembre de 2016

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CINE

"Sully" (2016), de Clint Eastwood: Gran alegato a favor de la sensatez

19 nov 2016

Fuente: José López Pérez (elllobregat.com)

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"No creo en el pesimismo. Si las cosas no salieron como lo esperabas, sigue adelante. Si te empeñas lo consigues. Si crees que va a llover, lloverá". Clint Easwood

Durante muchos años consideré a Clint Eastwood (San Francisco, California, 31 de mayo de 1930) un cineasta referencial. Títulos como "Sin perdón", "El fuera de la ley", "Mystic river", "Medianoche en el jardín entre el bien y el mal", "Poder absoluto", "Un mundo perfecto", "Ejecución inminente", "Million dólar baby", "Banderas de nuestros padres", "Cartas desde Iwo Jima", "El intercambio" o "El francotirador" ya forman parte de la historia del cine, pero es que además también ha dirigido otros films no tan redondos pero si muy inspirados como "Space cowboys", "Los puentes de Madison", "Gran Torino" o "Impacto súbito". En los últimos años varios films fallidos o mediocres como "J. Edgard", "Deuda de sangre", "Jersey boys" o "Más allá de la vida" me hacían pensar que se estaba alejando de su línea habitual y sin embargo, ahora cuando tiene 86 años ha creado otro film magnífico, armónico, "Sully", una de esas obras que hacen amar el cine. Clint se mantiene en plena forma.

Tom Hanks no es precisamente uno de mis actores favoritos, aunque reconozco que me convenció, por ejemplo, en la reciente "Esperando al rey", en "Sully" hace una interpretación soberbia, imprescindible para que la película se eleve. También Aaron Eckhart.

El guión es excelente, lo firma Todd Komarnicki, basándose en el libro de Chelsey Sullenberg y Jeffrey Zaslow. Como es conocido cuenta una historia real. Chesley "Sully" Sullenberger es un piloto aéreo que en 2009 se convirtió en un héroe cuando, al poco de despegar, su avión se averió y logró realizar un aterrizaje forzoso del aparato en pleno río Hudson, en Nueva York, con 155 pasajeros a bordo.

"Sully" tiene momentos de cine de catástrofes, otros de drama, pero donde más brilla es en su alegato en favor de la experiencia y de la verdad, sin manipulación. Pone el foco en lo fácil que puede resultar para algunos massmedia y especialmente las televisiones= convertir a un héroe en villano solo por conseguir audiencia.

Actualmente parece que la sociedad no valora la experiencia, casi es una lacra. "Sully" demuestra que la experiencia es vital y que el trabajo en equipo entre gente veterana y gente más joven es bueno para todos, enriquece a todos, valga la redundancia. En esta materia el film es magnífico. Dura 96 minutos, justo lo que necesita para explicar la historia que quiere contar.

El film rinde homenaje a la cultura del esfuerzo, al trabajo bien hecho y se postula como un alegato en favor de la sensatez. Los flaschbacks están muy bien colocados y aportan información necesaria al espectador. Logra generar interés en todo momento a pesar de que la historia es muy conocida.

También es muy bueno el score de Christian Jacob y Tierney Sutton Band, y muy especialmente el tema que firma el propio Clint Easwood.

"Sully" es una de las mejores películas de 2016, sin duda.

Fuente: José López Pérez (elllobregat.com)
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