Militares paraguayos ocupan comisaría en zona de estado de excepción
10 may 2010
Fuente: Asunción, 9 (EFE).-
Tropas del Ejército paraguayo desplazadas en la región donde rige el estado de excepción ocuparon la noche de este sábado una comisaría policial durante una operación en busca de miembros del grupo armado que opera en el norte del país, denunciaron hoy las autoridades.
El confuso incidente se produjo en el poblado de Huguá Ñandú, en el departamento de Concepción, una de las cinco provincias donde desde hace 15 días rige la medida de excepción declarada por 30 días para atrapar a los cabecillas del autodenominado Ejército del Pueblo Paraguayo (EPP), de izquierda.
La comisaria 27 de esa localidad, situada unos 600 kilómetros al norte de Asunción, fue copada por tropas militares, que también irrumpieron en una fiesta familiar, en la que se creía que estaría Magna Meza, una cabecilla del EPP, informaron medios locales.
"Es inaceptable el procedimiento. El presidente (Fernando Lugo) ha sido claro en que el estado de excepción sólo permitiría un marco legal para el apoyo de las Fuerzas Armadas a la Policía Nacional en materia de seguridad interna", se quejó el ministro de Interior, Rafael Filizzola en declaraciones a periodistas.
El secretario de Estado se trasladó esta madrugada a la zona para verificar lo ocurrido en la sede policial, en donde se observan a través de la televisión rastros de impactos de bala en vehículos de las fuerzas policiales.
La actuación militar "no se ajusta a los objetivos trazados en la declaración del estado de excepción y menos al orden constitucional", aseveró Filizzola.
El fiscal de Concepción, Celso Morales, explicó a los periodistas que fue convocado para acompañar la operación militar, que estuvo a cargo del coronel Ramón Benítez y ejecutada por 300 hombres, en una fiesta realizada a tres casas de la comisaría, resguardada por 25 agentes.
"Es un atropello contra la institución policial. El Ministerio Público no apoyó (la operación), acompañó, pero sin orden judicial", indicó Morales.
Por su parte, el Comando Conjunto de las fuerzas militares admitió el hecho a través de un comunicado y argumentó que el incidente se produjo en respuesta a disparos efectuados desde la comisaría contra los uniformados que realizaban la operación.
Ya en Asunción y tras una reunión con el jefe de Estado, Filizzola reafirmó que "hubo excesos" y que el general Bartolomé Pineda, comandante de las tropas militares desplazadas a la zona, "asumió el compromiso de colaborar plenamente" para sancionar a los responsables.
"Hubo un ataque o por decir lo menos atropellaron la comisaría y sometieron de una manera absolutamente ilegitima" al personal policial, aseguró el ministro al enfatizar que "ninguna explicación (militar) fue convincente".
Huguá Ñandú está situada en una apartada región de Concepción y la misma sede policial fue atacada en 2006 por el EPP, una escisión del extraparlamentario Partido Patria Libre (PPL) y que opera en los bosques de Concepción y San Pedro (centro).
Fuente: Asunción, 9 (EFE).-
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