Está confirmado que el Presupuesto General del Estado (PGE) para la gestión 2017, ha sido reprogramado con una disminución obligada debido a la caÃda de los ingresos por el rubro de exportación de gas natural a los mercados de Brasil y Argentina, efecto internacional que se mantendrá indefinidamente, aunque con cierta expectativa que pueda darse con un cambio en la polÃtica económica de Estados Unidos.
De acuerdo a los datos expuestos por el titular de finanzas púbicas del paÃs de manera general el valor total del IDH y las regalÃas caerá de 11.555 millones de Bs programados para la actual gestión, a sólo 8.953 millones de Bs. para el año venidero. Desglosando las cifras, en cuanto al IDH, la reducción será de 7.395 millones a 5.730 millones de bolivianos, en tanto que las regalÃas bajarán de 4.160 millones registrados este año a 3.223 millones de bolivianos el 2017.
El punto claro es que, el valor de nuestras exportaciones de gas tienen efecto de caÃda en función a la relación de precios que rige internacionalmente y tiene que ver con el precio del barril de petróleo. Por lo menos de momento sin posibilidad de que se produjera un cambio sustancial en sus valores vigentes.
Para el caso nuestro y como sucede con paÃses dependientes de la exportación de sus materias primas, la presión que ejercen las economÃas de poder, sean del norte, Europa o de paÃses asiáticos, como se da en el último tiempo, tienen su efecto directo en los presupuestos programados y en las condiciones de su administración para el sostenimiento de la economÃa nacional.
La caÃda de ingresos es inobjetable, en el sentido de tener que aceptar las conversiones financieras internacionales y adaptar nuestra economÃa a esas circunstancias, pero tomando las previsiones del caso, que no pueden ser otras que la reducción de gastos a nivel nacional, con polÃticas de austeridad y buenos planes que prioricen las obras de mejoramiento vecinal, en las áreas rurales, cuanto en las ciudades, satisfaciendo la expectativa ciudadana que desea, comodidad y seguridad para vivir bien.
Mientras persista la situación financiera internacional, con un precio del barril de crudo entre 45 a 60 dólares, las cosas tienen que manejarse con mucha prudencia, encarando la proyección y ejecución de los programas que por su utilidad tengan efecto "saludable", porque el vivir bien depende de las condiciones en que la población desarrolla sus labores habituales, en el hogar y en el trabajo.
Sabiendo que la venidera gestión tendrá un recorte importante, es necesario tener anteladamente la disposición de gastos que aplicarán la Gobernación como la Municipalidad, para que la ciudadanÃa tenga pleno conocimiento de cómo se gastarán los recursos públicos en beneficio de la mayorÃa ciudadana.
Fuente: LA PATRIA
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