El periodista busca la verdad y la justicia para el bien colectivo

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Ser periodista es ser un misionero en busca de la verdad y la justicia como manifestó Edmundo Rocabado ex Jefe de Redacción del periódico LA PATRIA, sabias palabras que alguna vez utilizó para definir que es un periodista, puesto que el trabajo que realizan los comunicadores, siempre y en todo lugar, tiene el propósito de informar en defensa del bien colectivo y en algunos casos para mediar conflictos.

De lo que se trata es de buscar el bien común, frente a las injusticias provocadas por agresiones psicológicas, verbales y físicas que se presentan en cualquier instante sin importar la condición o clase social de las personas.

Por estos antecedentes, los periodistas nos convertimos en misioneros, en combatientes de la verdad y la justicia, enfrentándonos ante cualquier situación negativa que se presente, también como fiscalizadores del trabajo que se realiza a nivel de autoridades, sean nacionales, departamentales y/o municipales, porque de ello depende el progreso y desarrollo de nuestra región.

Asimismo, el trabajo que realizamos lo hacemos utilizando el medio de comunicación en el que trabajamos para hacer conocer la voz de los necesitados, ser parciales ante la evidencia de maltrato, trabajo que debe ser tesonero para bien de la humanidad.

Ser periodista, es brindar todo su tiempo para estar presente en hechos que se producen para mantener informada a la población, estar atento a cualquier desenlace, sin tomar en cuenta la hora, donde, cuando, ni en qué condiciones, simplemente cumpliendo con una obligación y responsabilidad como es la de informar.

En muchos casos los periodistas hemos sido testigos de hechos que van en contra de los derechos humanos, uno de esos casos, es el avasallamiento de la propiedad privada, que encabezan algunos malos ciudadanos.

Estos que se hacen llamar dirigentes engañan a los pobres exigiéndoles dinero con la promesa de otorgarles un terreno. Al descubrirse la mentira, los afectados no denuncian el engaño porque viven bajo permanente amenaza de agresiones e incluso de muerte.

A raíz de estos hechos, incluso advertimos que algunas personas ocupan cargos jerárquicos, por haber logrado agrupar a muchas personas y haber liderizado los avasallamientos.

Hoy día estos “dirigentes” hacen y deshacen en los sectores donde se encuentran cientos de familias amenazadas y amedrentadas sin tener la oportunidad de denunciar los malos tratos que reciben de parte de los supuestos defensores.

Otros casos que los periodistas hemos sido testigos, son los maltratos en contra de niños que fueron violados incluso por sus propios progenitores, el caso de niños que son objeto de maltrato de parte de sus padrastros o madrastras, niños que al no ser queridos por sus padres, son abandonados y un sin fin de casos que deben llamar la atención de la ciudadanía en general.

Un hecho que nunca olvidará la población, es cómo una madrastra tenía a sus dos hijastros de 6 y 8 años en un cuarto, encerrados, encadenados a la cama, por haber robado la comida del perro para alimentarse, o por haber comido el pan duro que dejó la rata que era mascota de la familia, hecho que fue comprobado el momento que los dos hermanitos fueron rescatados por efectivos policiales, que al llevarlos a la revisión médica mostraban un cuadro de desnutrición avanzada, además de las heridas que tenían en su cuerpo, porque mientras ellos sufrían hambre, cuatro a cinco perros, tenían comida en el patio incluso echada en el piso.

La impotencia de no poder hacer nada es el peor trance que pasamos, puesto que al cumplir nuestra labor de periodista, simplemente podemos recibir la información y realizar el seguimiento del tema ya que es la justicia la que debe adoptar una sanción.

El estar en pleno combate como fue el enfrentamiento entre mineros, es otro de los hechos donde algunos periodistas, tuvieron que estar a pesar de la incomodidad, presión y amenazas de muerte por la detonación de dinamita, cachorros de dinamita y otros artefactos explosivos, un hecho que en octubre de 2006, enlutó a la población de Huanuni y afectó a todo el país.

POSITIVO

A pesar de brindar información sobre hechos negativos, también somos testigos de algunos otros que son un aliciente para todos, el nacimiento de un niño en una fecha importante, informar sobre el retorno de la paz cuando existen problemas y enfrentamientos, cuando se logra la sanción en contra de personas que hicieron daño, este tipo de información también agradable y recompensa los momentos de nervios que vivimos con los directos involucrados, nos anima a seguir trabajando para lograr un país en desarrollo, progreso y sobretodo, que viva en democracia porque de la democracia depende el bienestar de todos, incluido el trabajo que debemos continuar haciendo los periodistas, para informar de todo lo que ocurra sin temor a represalias o amenazas.

En muchas ocasiones también los periodistas por mantener informada a la población, nos encontramos en situación de peligro, aunque suene trillado y parezca un reclamo, no es así, simplemente lo que se pretende es reflejar en esta nota dedicada al Día del Periodista, que como comunicadores, podemos dar incluso la vida por cumplir con nuestro compromiso de brindar informada a la ciudadanía y a pesar de ser peligrosa, estaremos en el lugar de los hechos, para defender los derechos humanos y el bienestar de todos.

Pero sobre todo, defenderemos la libertad de expresión y de prensa frente a los permanentes intentos por controlarla, pese a los insultos que provienen desde las más altas esferas del poder político, los periodistas nos debemos a nuestro pueblo a quien siempre le informaremos con la verdad, aún a riesgo de la propia vida.

Fuente: LA PATRIA