Joel Gonzales, un personaje de la Tv que se enamoró de Oruro

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"Al fondo hay sitio" es una novela que se emite por la pantalla chica, lleva varias temporadas y su final, como todo en la vida está próximo. A lo largo de los años de esta producción peruana, muchos televidentes se fueron identificando no solo con sus personajes, sino con las situaciones del diario vivir.

Los prejuicios que son una demanda de la telenovela, al igual que los triángulos amorosos, la unión familiar, la solidaridad y mostrar que la convivencia en un mundo entre diversidad de clases sociales, es posible.

Obviamente esta familia de actores, lo muestra de manera jocosa, exagerada en algunas circunstancias, pero siempre divertida, sin dejar de lado, lo feo de toda telenovela, como es el suspenso, la envidia, la intriga y los malos entendidos.

JOEL

Volviendo a los personajes, hace poco días estuvo presente en la ciudad de Oruro, Edwin Erick Elera Salinas, más conocido como Joel Gonzales en "Al fondo hay sitio".

Se ganó la simpatía de la ciudad de Oruro, el público que lo conoce requirió de él, un autógrafo, una fotografía que fue correspondida por el artista, aunque confesó no poder complacer a todos como quería, debido a varias circunstancias.

El último día que estuvo en la Capital del Folklore de Bolivia, se refugió en un café. Estaba apesadumbrado por el mal momento, según él, que le hicieron pasar las personas que lo trajeron a actuar a la ciudad.

Sin embargo, en medio del enojo reflejado en su rostro, accedió al diálogo y salió el personaje de la telenovela, con los mismos gestos y manera de hablar que nos tiene acostumbrados en el programa de la televisión.

ORURO

Indicó que fue la primera vez que llegó a la ciudad de Oruro, calificó la atención del público como buena, principalmente por el cariño que le demostraron.

"He sentido la admiración de las personas por las calles, estuve paseando por el mercado Fermín López, me tomé fotos con los que pude, ya no salía del mercado. Fui al mercado Campero y siempre que voy a una ciudad, tengo poco tiempo para conocer, pero me gusta caminar por los alrededores", aseguró.

Otro aspecto que mencionó sin reparo, fue la actividad de la entrada universitaria.

"Para mí ha sido algo novedoso, porque así nomás no lo veo, me explicaron un poco. Sé que Oruro es un lugar donde hay mucha fiesta, está muy organizada en ese sentido, es bueno que mantengan así al pueblo, alegre. Imagino que también hay algunos problemas, pero esto alegra mucho a la gente, eso es lo que he percibido", señaló.

REALIDAD

Erick comentó que en la vida real Joel Gonzales tiene muchas cosas de él, principalmente sacó lo más pícaro, aprovechando lo que no puede expresar en lo cotidiano.

El estar presente en la novela, es tener un mundo en paralelo sobre las espaldas, ya que así como en la realidad, no se sabe qué es lo que le pasará en los episodios, porque los guiones son entregados día a día.

"Es una buena experiencia, crecemos como una verdadera familia. De hecho este año se acaba la novela, todas las temporadas se acaban por completo y un poco apenado, porque me alejaré de tantos monstruos en la actuación de mi país, son grandes actores, buenas personas, pero esto es así", indicó.

Para Erick participar de esa novela le permitió crecer no solo como actor, sino también como persona, además que se le abrieron las puertas a nivel internacional, como Bolivia, El Salvador, Japón, Europa, entre otros.

El visitar esos países también forma parte de un compromiso personal, retribuir el cariño de los fans, regalar siempre una sonrisa, pese al cansancio o a los problemas que puedan presentarse.

"Lamentablemente a veces no se puede cumplir con todos, y por ahí uno queda con un disgusto, pero es algo que no se puede manejar", añadió.

FUTURO

Por ahora el futuro es terminar la actuación en la telenovela, pendientes quedan doce propuestas para hacer televisión. También existe una para hacer un programa en Bolivia, aún nada oficial.

La actuación se complementa con el canto y la composición, aspectos que los tuvo en práctica desde muy joven cuando era integrante del grupo "Joven Sensación".

"Canto la música en general, me encanta bailar. Canté en otros grupos como los Hermanos Yaipén, luego fui solista. Más tarde comencé con la actuación en alguna que otra novela, hasta que llegó ´Al fondo hay sitio´. Los actores en la novela somos una familia, hay pocos problemas en realidad, nos llevamos bien y es lo que más voy a extrañar. Nos llevamos como una verdadera familia", dijo de su elenco.

Uno de los secretos de Erick para llegar lejos, es creer en uno mismo, sin bajar los brazos. Consideró que la actuación es una carrera muy complicada en América Latina, por ello, siempre es recomendable hacer algo en paralelo, tocar las puertas de todo lado y no quedarse dormido.

Antes de despedirse, agradeció una vez más a la ciudadanía de Oruro por el cariño que le mostró. "Espero volver pronto", concluyó.

Fuente: LA PATRIA