El mes pasado se celebró una vez más el DÃa de los Adultos Mayores, para decirlo de manera más concreta una fecha de los ancianos, asà considerados después de cumplir más de 65 años y pasar a un reconocimiento parcial de ciertos derechos que corresponden al sector pero que se cumplen parcialmente.
Un dirigente del sector reconociendo el valor que tiene alcanzar cierta edad luego de haber entregado la mayorÃa de esos años al servicio de la comunidad desde diferentes áreas de actividad, señalaba que "llegar a viejo es cumplir una carrera, la carrera de la vida", singular extremo que muestra el cumplimiento de objetivos trazados en un largo recorrido de muchas vicisitudes.
Una serie de factores son parte del cumplimiento parcial de media docena de leyes que deberÃan favorecer plenamente a los adultos mayores y que se cumplen a medias, por desconocimiento de los beneficiarios, pero también de los prestatarios de servicios, en algunos casos con posiciones deliberadas y en otros porque no existen los mecanismos adecuados para imponer el cumplimiento de las medidas que de alguna manera son paliativas en la economÃa de la gente de la tercera edad.
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Son frecuentes las denuncias de adultos mayores sobre violencia, maltrato, despojo de bienes, abandono, y lo más frecuente incumplimiento a los descuentos establecidos a favor del sector, en diversos servicios, además de una serie de trabas, especialmente en entidades públicas donde gente mayor debe efectuar algunos trámites pero no recibe la cooperación necesaria para cumplir con las gestiones, que en muchos casos tienen que ver con pago de impuestos o facturas por servicios de luz, teléfono o agua, entidades en las que se omiten de manera deliberada las condiciones preferenciales para estos ciudadanos adultos mayores.
Otro grave problema se presenta en la atención médica, en los centros de salud, en los que se observa a muchos ciudadanos de la tercera edad, hombres y mujeres que deben madrugar para obtener una ficha de atención que se concreta luego de varias horas de espera, esto si no se dispone un examen para varios dÃas después, con los riesgos y molestias que tal situación implica, como si fuera poco para recibir una medicación de la más corriente en pÃldoras y algún ungüento de poca efectividad, lo que obliga a muchos pacientes adquirir otra medicación en farmacias particulares con un gasto extra y obligado para curar algunos males.
Se requiere mayor divulgación de las leyes y derechos a favor del segmento de adultos mayores, al establecerse que hay desconocimiento de las medidas y que a pesar de la existencia de éstas, los mecanismos de aplicación no son los más óptimos que se quisiera, por lo que se hacen necesarias campañas de mayor intensidad para concienciar a los interesados en la defensa de sus derechos y a los prestatarios de tales beneficios en su cumplimiento.
La Ley 1886 sobre derechos y privilegios del adulto mayor, establece el descuento del 20 por ciento en pasajes de todo tipo de transporte, también en las facturas de energÃa eléctrica, agua y teléfonos entre otros, que deberÃan aplicarse de manera formal aún asà no lo exigiera el beneficiario. Hay otros derechos que igualmente se ignoran en ambos sentidos y que deben ser motivo de atención para servir mejor a los ciudadanos que merecen respeto en el transcurrir de una vida con dignidad y reconocimiento de la colectividad.
Fuente: LA PATRIA