La manera más práctica de "sentar" soberanÃa en nuestra frontera y de forma especial allà donde la avidez extranjera afecta nuestros intereses, es creando la infraestructura necesaria que comienza con un buen puesto militar de avanzada y que representa el inicio de un factor de poblamiento en la zona, creando las mejores condiciones para el asentamiento de nuestros coterráneos.
En la zona potosina próxima a las vertientes del Silala, la comunidad de vecinos es realmente Ãnfima, pocas familias dedicadas a la ganaderÃa y la agricultura de subsistencia se convierten en guardianes permanentes de nuestro territorio y de la riqueza de la zona, la misma que ahora tiene además la presencia de efectivos militares, que entre otras tareas, fuera de su celosa vigilancia del territorio, estarán incursionando en labores de acción cÃvica, promoviendo un mayor asentamiento humano, que respaldado por proyectos productivos, utilizarán los recursos naturales de la zona, facilitando el crecimiento económico de esa vasta región en la que es urgente promover y garantizar el asentamiento poblacional.
Se menciona la vigencia del puesto militar ubicado en el cantón Quetena Chico de la provincia Sur LÃpez de PotosÃ, en razón de una reciente decisión del Ministerio de Defensa para realizar trabajos de mejoramiento en el puesto castrense, pero al mismo tiempo en la zona fronteriza, en la que ya no se registran incursiones irregulares por parte de los vecinos, militares y civiles que hasta hace tiempo transitaban por nuestro territorio "como Pedro por su casa".
Si hay algo importante además de la presencia de efectivos militares en la zona, es que funcionarios chilenos ya no pueden transponer nuestro lÃmite fronterizo para hacer trabajos de "mantenimiento" en los canales artificiales que desvÃan el agua del Silala hacia el territorio vecino, situación comprobada que además es otra prueba contundente de dos hechos especÃficos, que las aguas del Silala provienen de vertientes y que no hay rÃo de curso internacional, sólo canales construidos exprofesamente para captar esas aguas bolivianas.
En el Ministerio de Defensa se ha ratificado que se dispondrá de mayor presupuesto para mejorar las condiciones de permanencia de los efectivos militares y facilitarles además elementos necesarios para encarar una serie de planes que impulsen el desarrollo de esa región. El puesto de avanzada se ubica a tres kilómetros de la frontera con Chile, tiene dos secciones y un número adecuado de personal militar.
La intención del Gobierno es ampliar las actividades productivas en la región, especialmente mejorando las condiciones y el uso de las aguas del Silala, en función a proyectos que ya están siendo implementados y que servirán a una mayor presencia de ciudadanos, que además se beneficiarán con la dotación de una hectárea de terreno gratuito y el apoyo para la construcción de viviendas sociales en el área de utilidad de nuestros recursos hÃdricos que deben beneficiar a nuestros agricultores y ganaderos asentados en la alejada zona del altiplano potosino.
Recientemente se ha informado sobre el viaje de una delegación de parlamentarios chilenos a la zona, con objeto, dicen, de efectuar una "inspección" de viso en el terreno. Es importante que los observadores se convenzan de la inexistencia de un rÃo y asuman la responsabilidad evidente de reconocer que las aguas son provenientes de las vertientes del Silala. El mandatario boliviano ha formulado además una invitación directa a la presidente de Chile para visitar el Silala, poco probable que acepte, pero la buena intención boliviana está abierta.
Fuente: LA PATRIA
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