Loading...
Invitado


Domingo 21 de agosto de 2016

Portada Principal
Revista Dominical

Yayoi Kusama y sus puntos

21 ago 2016

Fuente: Carlos Decker-Molina

¿Fotos en alta resolución?, cámbiate a Premium...

Sí, las mujeres solitarias tienen una gran imaginación, no recuerdo quién lo dijo, la frase es un acierto si se trata de definir a la japonesa Yayoi Kusama.

Yayoi dejó Matsumoto y se fue a Nueva York, justo en la época vital del expresionismo abstracto (1957). Su equipaje constaba de dos mil cuadros y, con el resto, hizo una fogata de despedida.

En ese tiempo, la escena nuevayorkina estaba dominada por Jackson Pollock y Willem de Kooning representantes del expresionismo, poseedores de gestos abstractos y dramáticos a los que YayoiKusama se enfrentó, sin mucho éxito, con sus monocromos repetidos al infinito. Puntos y más puntos, pues Yayoi sufre de un trastorno obsesivo desde la infancia, ve puntos por todos lados. El arte resultó ser su terapia.

Pasó el tiempo y...

Andy Warhol, ClaesOldenburb y George Segal, se adueñaron de la escena e impusieron el arte pop. La Kusama los frecuentó y fue muy amiga de Warhol. A finales de los 60, influida por el pop y el hippismo, revolucionó la escena artística con unas performances abiertas, tanto en plazas como en el puente de Brooklyn, ocasión en la que pintó puntos de colores en los cuerpos desnudos de hombres y mujeres, que se ofrecieron como lienzos humanos.

Es la época de unas de sus creaciones más importantes: Campo Fálico (PhallicFields). Campo infinito que multiplica el original gracias al juego de espejos de las cuatro paredes. Falos punteados de rojo que más parecen figuras de un jardín espacial de película de ciencia ficción.

La obra de Yayoi Kusama es, justamente, la multiplicación inaudita de puntos coloreados que introducen al espectador en un mundo alucinante.

La japonesa no sólo pinta, pues es diseñadora de ropa, muy rara y especial. Son vestidos que tienen huecoscirculares abiertos en las partes íntimas de la modelo, por ejemplo, un hueco que permite ver el pubis o uno de los senos.

"Se dice con frecuencia que soy una loca pornógrafa, porque tengo muchas obras en las que figura o se sugiere el sexo masculino. Están equivocados, son creaciones producto de mi miedo al sexo" La japonesa tuvo una infancia infeliz. Su madre exigía a la niña a seguir a su padre cuando este iba a ver a sus amantes, para después obligarla a relatar las escenas de sexo que había visto, para después emprenderla a golpes contra ella para desahogarse.

Kusama tuvo una relación amorosa, sin sexo, con el artista estadounidense Joseph Cornell. Cuando murió Cornell en 1972 decidió retornar al Japón.

La retrospectiva que se muestra en Estocolmo, estuvo en MoMa de Nueva York y el Tate de Londres. Una de sus obras se vendió en el Christie´s de Nueva York en 5,1 millones de dólares.

El trabajo de la Kusama está inmerso en el arte conceptual, contiene feminismo, minimalismo, surrealismo y expresionismo abstracto. En todas sus obras hay matices autobiográficos, psicológicos y sexuales.

Hoy, Yayoi Kusama vive en el Japón a donde retornó en 1973. Sus creaciones "japonesas" son las más conservadoras de su carrera. En 1977 decidió voluntariamente internarse en un hospital psiquiátrico. Confesó que escucha voces desde que tenía cinco años.

Su estancia en el psiquiátrico no es un obstáculo para su trabajo, al contrario, no sólo sigue pintando, sino que ha escrito novelas y ayudó a Louis Vuitton en la creación de una colección de mucho éxito.

Alguna vez Yayoi Kusama (ha pasado los 80), ha dicho que se siente muy bien sola con sus fantasmas, lo que confirma el dicho de que las mujeres solitarias tienen una gran imaginación.

Fuente: Carlos Decker-Molina
Para tus amigos: