Según los cálculos de Human Rights Watch (HRW), al menos 817 personas murieron ese dÃa cuando las fuerzas de seguridad egipcias desalojaron sangrientamente el campamento islamista de la plaza cairota de Rabaa al Adauiya.
Mientras, el Instituto de Medicina Forense rebaja esa cifra a 499 muertos en los desmantelamientos de las protestas de esa plaza y de la de Al Nahda.
"Fue un dÃa negro en la historia de Egipto y, a pesar de que han pasado tres años, ningún policÃa ha sido juzgado", comenta a Efe el director de la Iniciativa Egipcia para los Derechos Personales, Gaser Abdelrazeq.
Según una investigación sobre la masacre realizada por esa ONG, la PolicÃa utilizó "una fuerza mortal para desalojar (la plaza de) Rabaa (al Adauiya)".
El golpe fue liderado por el entonces ministro de Defensa y actual presidente del paÃs, Abdelfatah al Sisi.
En esas plazas, miles de islamistas partidarios de Mursi pidieron la vuelta del presidente derrocado y allà se quedaron hasta el 14 de agosto, cuando las fuerzas de seguridad desmantelaron violentamente las protestas y causaron cientos de muertos.
Según el Consejo Nacional de Derechos Humanos (CNDH), que elaboró un informe en 2014 a petición del gobierno egipcio, las fuerzas de seguridad hicieron un "uso excesivo de la fuerza", pero los seguidores de Mursi dispararon primero, lanzaron piedras y cócteles molotov contra los agentes, que habÃan pedido a los manifestantes que desalojaran de forma pacÃfica.
"La justicia egipcia está politizada", opina Baiumi, que agrega que el único proceso que llevan los tribunales egipcios al respecto "se basa en los informes del Ministerio del Interior, cuyos dirigentes y agentes llevaron a cabo la masacre".
En dicho proceso, conocido como "el caso del desalojo de Rabaa", están acusadas 739 personas, la mayorÃa de ellas islamistas y periodistas, por formar agrupación armada, asesinar a ciudadanos y policÃas, y resistirse a las autoridades.
Entre los acusados, destaca el fotoperiodista Mahmud Abu Zeid, alias Shawkan, detenido cuando estaba cubriendo el brutal desalojo y cuya liberación es exigida desde entonces por muchas ONG y organizaciones internacionales.
Para el director de la Iniciativa Egipcia para los Derechos Personales, en algún momento de un futuro cercano, la sociedad y el paÃs tendrán que "reconocer la tragedia, compensar a las familias o asumir la responsabilidad". "Egipto tiene difÃcil alcanzar una situación polÃtica estable sin tratar esta tragedia", sentencia.
Fuente: El Cairo, 13 (EFE).-
Para tus amigos:
¡Oferta!
Solicita tu membresÃa Premium y disfruta estos beneficios adicionales:
- Edición diaria disponible desde las 5:00 am.
- Periódico del dÃa en PDF descargable.
- FotografÃas en alta resolución.
- Acceso a ediciones pasadas digitales desde 2010.