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Sábado 06 de agosto de 2016

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Revista Tu Espacio

PEDIATRÍA

Criptorquidia

06 ago 2016

Por: Dr. Reynaldo Tupa Lima - Exclusivo para Tu espacio

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La criptorquidia es la ausencia del testículo en escroto (falta de descenso de los testículos), puede ser unilateral o bilateral. En la mayoría de los casos se produce el descenso antes del primer año. Si los testículos no descendieron para cuando el niño tenga un año de edad se deben evaluar ya sea por exámenes como la ecografía. La intervención mediante tratamiento de descenso testicular puede reducir la probabilidad de un daño permanente en la zona, lo cual puede llevar a problemas de esterilidad posteriormente en la vida si no se realiza ninguna medida.

Un testículo no descendido tiene una mayor probabilidad de presentar cáncer motivo por el cual es importante el control de rutina desde el nacimiento. Para un correcto diagnóstico se debe realizar una adecuada anamnesis o búsqueda de antecedentes familiares de criptorquidia, antecedentes maternos como la edad gestacional, peso al nacer, prematuridad, ingesta o contacto con fármacos antiandrogénicos. Es fundamental preguntar sobre el momento desde que se aprecian la bolsa escrotal vacía además de si esta entidad es unilateral o bilateral, pues la orientación diagnóstica cambia si los testículos estaban en la bolsa al nacer y desaparecen posteriormente o si nunca estuvieron descendidos y continuar con una debida exploración física de los genitales externos, en el primer control de salud de los varones tras el nacimiento y control riguroso hasta los 6 meses de edad, seguidamente se puede solicitar una ecografía de rastreo testicular para determinar la localización del testículo para apoyar el diagnóstico.

En cuanto al tratamiento se recomienda el envío de los niños con criptorquidia al cirujano pediatra o urólogo pediatra a partir de los 6 meses y siempre antes del primer año de edad. Debido a la falta de descenso testicular espontáneo después de los 6-12 meses, se recomienda que el tratamiento quirúrgico se lleve a cabo lo antes posible después de los 6 meses y a más tardar entre los 12 y 18 meses de edad. La cirugía conocida como Orquidopexia coloca el testículo en su posición normal.

La complicación más frecuente de un testículo no descendido tiene entre 10 y 40 veces mayor riesgo de sufrir una degeneración maligna siendo el seminoma el tumor más frecuente y la falta del desarrollo testicular (atrofia testicular) que puede llevar a esterilidad, por lo tanto señores padres debemos vigilar el descenso testicular y en todo caso mejor acudir a su pediatra de cabecera.

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