Domingo 02 de mayo de 2010
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La historia les conoce con el denominativo de "Mártires de Chicago -, eran inquietos activistas sindicales y fogosos oradores, aparte de grandes propagandistas, la mayoría eran inmigrantes alemanes y partidarios de la concepción política del Anarquismo.
Ellos, participaron activamente en la preparación de la huelga general que debía estallar el primero de mayo de 1886 en las principales ciudades de Estados Unidos, cuya consigna era plasmar en realidad la jornada laboral en 8 horas de trabajo, en una época donde las relaciones laborales podemos resumirlas en 4 aspectos: La terrible explotación de los niños y mujeres, la excesiva duración de la jornada de trabajo (de 10 a 16 horas ), los salarios bajos y la concentración de gran número de gente en ciudades insalubres.
En efecto, el día Primero de Mayo, miles de trabajadores salieron a las calles en diversas ciudades de Estados Unidos. En Chicago la huelga paró casi completamente la ciudad, como era costumbre estos movimientos fueron duramente reprimidos por la Policía.
En la noche del 4 de mayo de 1886, cuando se realizaba un mitin para protestar por la acción policial, cuando la manifestación terminaba, llegaron unos 200 policías, en ese momento, alguien lanzó una bomba, que al estallar mató a uno de los agentes. Nunca se supo quién lanzó el explosivo, pero fue suficiente motivo para una arremetida brutal contra los principales dirigentes. Ocho líderes laborales que fueron detenidos ese día, fueron acusados de conspiración y asesinato por la explosión de la bomba que mató al policía. En el juicio no se les pudo probar participación o relación con la explosión, pero la sentencia ya estaba dictada. Cuatro dirigentes anarquistas fueron llevados a la horca, al mediodía del 11 de noviembre de 1887. Uno; de ellos Ling se suicidó en la prisión.
