Martes 07 de junio de 2016
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Editorial y opiniones
Suiza cuestiona sus propios bonos sociales
07 jun 2016
Dr. Raúl Pino-Ichazo Terrazas
Los suizos son conocidos mundialmente por su infranqueable posición neutra en los conflictos que diezmaron a los paÃses, sobre todo a los pueblos que acarrearon las consecuencias de los devaneos polÃticos y de la megalomanÃa de muchos lÃderes, como lo registra la historia.
Suiza, para la ejecución y desarrollo de su polÃtica social interna desembolsa mensualmente a cada ciudadano adulto 2.300 francos suizos y 900 francos suizos a los jóvenes (cifras aproximadas), desobligándose con ello de cualquier carga o prestación social.
El concepto de bonificación que también se ejecuta en nuestro paÃs con el propósito de aliviar las necesidades de subsistencia se ubica en el cuestionamiento de su efectividad y sobre todo si ese alivio económico contribuye a que el ciudadano mantenga su capacidad creativa y sus anhelos de superación económica y educativa o, por lo contrario, adormece al beneficiario en sus aspiraciones, capacidades y desarrollo de su criterio personal para encarar o inventar nuevas técnicas que favorezcan a la sociedad, ¿Será que estamos debilitando la fuerza creativa que reside en todo ser humano y, peor, acostumbrándolo a recibir dinero sin justificación ulterior, como es usanza cuando se percibe alguna suma?
