Mujer, madre y profesional con "tiempo de calidad" para la familia

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Desde muy pequeña tenía el don de realizar diseños y ya sentía ganas de ser comunicadora, estudiar idiomas o medicina, de a poco, las cosas se dieron de esa manera y cuando hubo la posibilidad de viajar a Chile donde estudió para ser diseñadora de vestuario, no dudó en hacerlo. Al retornar a Bolivia, su trabajo tuvo mucha acogida y se dio cuenta que no es solo una profesión maravillosa en la que puede desplegar mucha imaginación y a la vez generar empleo. Es de esta manera cómo resumimos el inicio de Mónica Siles Toro y el sacrificio de ser una personalidad que divide su tiempo entre el trabajo y su familia.

"Es innegable que cuando se dedica al ámbito profesional, necesariamente se sacrifica bellos momentos, eso es real, pero no obstante es importante la calidad de tiempo que se les brinde a los seres queridos porque en muchos casos se puede permanecer todo el día con ellos, pero no tienen la atención que ellos demandan", nos dice Mónica.

En algún momento, tuvo el reclamo de no compartir con la familia, pero poco a poco entendieron que la responsabilidad es una forma de vida apegada al trabajo tesonero porque se trata de transmitir valores a través del ejemplo.

Agradece una de las grandes bondades de su trabajo que le permite generar fuentes de empleo porque en más de un 90 por ciento de las madres que trabajan con ella acceden a un espacio donde tener a sus hijos junto a ellas.

En los talleres del atelier se acoge a dos generaciones en muchos casos, porque las abuelas ya llevan a sus nietos y para Mónica es una alegría porque piensa que no hay cosa más maravillosa que ver a los niños porque transmiten una energía y considera que son una bendición.

Como cualquier madre se siente privilegiada y bendecida con sus hijos, motivo por el que es agradecida con Dios por tener buenos chicos, cariñosos, nobles y esencialmente personas con valores.

Le tocó pasar, en alguna oportunidad, momentos sin ellos porque cree que es importante, paralelamente al amor de madre, el dejarlos ser libres, independientes con derecho a su propia realización personal y nunca quiso ser un obstáculo en sus vidas, mas bien alguien que les impulse a desarrollarse en el área que ellos quieran y "si tienen que alejarse por un tiempo, así tiene que ser", asegura.

Les digo a todas estas madres esforzadas que siempre se apoyen en el amor de Dios en su palabra, concientes de que ser madre es mucho mas que darles cobijo, alimento porque se debe dar a los hijos una formación integral, por lo que es importante darles valores y enseñarles que somos mas que materia, porque las madres somos personas que tenemos que tener un horizonte y una razón para vivir", manifiesta.