Antes de construir nuevos centros Oruro necesita de mercados limpios

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Antes de construir nuevas infraestructuras como la destinada al llamado Mercado Central, Oruro necesita con urgencia que los actuales centros de abasto que ya son suficientes, desarrollen sus actividades en condiciones higiénicas óptimas.

Este debe ser el objetivo de todos los actores involucrados como son autoridades, comerciantes o vendedores y consumidores, ya que el beneficio será común.

Un recorrido por los centros de abasto de nuestra ciudad permite comprobar que la venta de alimentos de primera necesidad como son la carne de res, pollo, cerdo o llama, así como verduras, se efectúan en lamentables condiciones de higiene.

La verdura está en el suelo y las carnes son manipuladas sin guardar las mínimas condiciones con las que debería operar un centro de venta de alimentos. Asimismo, las vendedoras deben cuidar mejor su vestimenta cubriéndose la cabeza para evitar la caída de cabellos y también usar guantes para el manejo de los alimentos.

Al parecer no existe la suficiente información y capacitación a los vendedores sobre cómo mantener un mercado limpio y sobre todo, cómo manipular los alimentos.

Un claro ejemplo de lo anotado se muestra en los mercados Simón Bolívar y Campero, donde se observa la venta y consumo de alimentos expuestos al aire libre y al sol, donde se asienta polvo o tierra mezclada con excremento de perro.

PROPUESTAS

Antes de exigir nuevos mercados será bueno para todos lograr un acuerdo en procura de contar en nuestra ciudad con centros de abasto en las mejores condiciones higiénicas posibles.

Los alimentos deben ser vendidos según el rubro y su manipulación debe efectuarse utilizando prendas de vestir adecuadas y guantes.

Otro aspecto importante es una buena iluminación, el drenaje limpio y destapado para los desechos sólidos, tener ventilación suficiente, contar con servicio de agua en cada puesto de comida, pisos lavados, paredes totalmente limpias, lisas y lavables, pero nunca como se tiene en el mercado más grande de la ciudad, como es el mercado Bolívar.

Este centro de expendio, del cual se quejan algunos comerciantes, se encuentra en deplorables condiciones de higiene, desde el momento de ingreso al lugar, se observa paredes y pisos sucios, puestos en malas condiciones, no existe iluminación, los olores nauseabundos incomodan a los clientes y seguramente dañan la salud de las vendedoras.

Para un mercado saludable, se debe tener mesones de azulejos que no estén desportillados y pasillos limpios relucientes como si fuera la cara limpia de las personas.

En los puestos, los alimentos deben estar ordenados, protegidos y refrigerados y nunca cerca de los pisos y baños, norma que no se cumple porque se observa este hecho tanto al interior como al exterior del mercado.

En el caso de los manipuladores de alimentos como son los que venden carne, al parecer no cuentan con una certificación de salud, no cuentan con un uniforme completo como mandil, la higiene personal adecuada, uñas cortas, manos limpias, cabellos limpios y peinados que no deben estar expuestos.

Por su parte el consumidor debe colaborar con la higiene del mercado, evitando botar basura, apoyarse en los alimentos, llevar animales, no comprar alimentos expuestos, porque los requisitos mínimos deben ser higiene personal y ambiental, manipulación higiénica de los alimentos para evitar contraer enfermedades transmitidas por su consumo.

Es importante para tener un mercado saludable, que los beneficiarios, entiendan la realidad que atraviesan, emprendiendo un diálogo entre partes, brindar y recibir adecuada información y conocimientos técnicos a los vendedores, actualizando sus reglamentos.

Para tener resultados positivos, es necesario la capacitación de las vendedoras en buenas prácticas de higiene para la venta de productos, tener relaciones humanas y comerciales, conocer aspectos de nutrición, salud e inocuidad alimentaria que debe estar a cargo de las instituciones encargadas de realizar el control del estado en los alimentos.

Esta sugerencia puede ser concretada con la sensibilización y socialización de los actores para lograr un compromiso de los vendedores que a su vez enseñarán a los consumidores a cambiar voluntariamente las condiciones del mercado.

La socialización de la propuesta debe realizarse con responsabilidad y obligación que permita obtener resultados que impacten la visión del comprador.

Para concretar este objetivo es necesario que, los actores, reconozcan la existencia del problema, buscar las soluciones y lograr que la comuna orureña se comprometa a participar.

Posteriormente, se debe realizar la capacitación de vendedores en el manejo de alimentos, buenas prácticas de higiene, tomando conciencia sobre las consecuencias que sufre la población y los propios vendedores, en su salud y la de su familia.

Los resultados de la capacitación deben verse con el cambio de buenas prácticas en el desarrollo de la jornada de trabajo.

Otro aspecto que es importante para el bienestar de vendedores y consumidores es la mejora en las condiciones de infraestructura e instalaciones y para ello se debe identificar los problemas, planificando las prioridades como la instalación de un buen drenaje y alcantarillado, que deben funcionar en óptimas condiciones.

La vigilancia constante y control del estado del mercado, es otro factor que debe ser tomado en cuenta por comerciantes y gendarmes municipales, constatando que no existan por ejemplo roedores, siendo importante para este aspecto, la constitución de un grupo de control en el que participen los vendedores y también de los consumidores.

Otro aspecto que debe ser tomado en cuenta para obtener resultados positivos, es reglamentar los acuerdos a través de documentos con respaldo jurídico el mismo servirá para brindar un eficiente servicio a la población en un mercado saludable, garantizando de esta forma la compra de los alimentos en condiciones adecuadas.

SERVICIOS

El elemento más importante para lograr estos objetivos, es contar con drenaje y canales para la eliminación de las aguas servidas, donde se tenga rejillas fáciles de desmontar para la limpieza de todo el sistema de desagüe, tener una pila de agua potable en cada puesto de carne y comidas de forma obligatoria, para tener pisos y paredes fáciles de limpiar que sean de colores claros, los ángulos, esquinas y uniones entre paredes deben ser redondeados para facilitar la limpieza.

Entre los servicios básicos, todos los mercados deben contar con servicios higiénicos que deben mantenerse limpios y con agua permanente, lejos de la venta de alimentos, cuyo sistema de ventilación se encuentre fuera del mercado.

Un sistema eléctrico debe contar con buen cableado y ser revisado periódicamente para evitar accidentes, no deben existir conexiones precarias.

Debe existir una adecuada disposición de basura con contenedores tapados en cada puesto, contar con un sistema de lavado periódico en todo el mercado hidratantes y mangueras.

ORGANIZACIÓN

La organización y ubicación de puestos debe realizarse de acuerdo al rubro según cada alimento como las carnes, lácteos y huevos; verduras frutas, abarrotes, comidas y otros en un lugar distinto.

Los pasillos deben estar libres, sin obstáculos, manteniendo el orden y respetando la línea establecida para cada puesto y no colocando alimentos fuera del puesto de venta para facilitar el tránsito de los clientes.

Según la propuesta la estructura debe permitir colgar balanzas en el frente del puesto, de manera que los compradores puedan fácilmente constatar el peso de las compras que realizan, siendo necesarios en el caso de puestos de venta de carne, pescado y fiambres, el espacio necesario para la instalación de refrigeradores o congeladores.

HIGIENE

Limpiar y desinfectar en forma diaria los servicios higiénicos y los basureros que se encuentran en cada puesto y el mercado, es lo óptimo para un centro de expendio.

Lavar y limpiar la maquinaria, utensilios, loza, cristalería, cubiertos que deben realizarse continuamente y de forma correcta con detergentes específicos para el lavado de grasa, evitando el uso de detergente en polvo y lavandina porque inactiva la acción de ambos.

Esta propuesta que se plantea para mejorar el aspecto de los mercados, especialmente donde se expenden verduras, carne, frutas y otros se realizó en base a un estudio realizado por la Organización Mundial de Salud y la Organización Panamericana de Salud, elaborado por Rita Medina Pando y revisada por María del Carmen Oller de Daroca, propuesta que debe ser tomada en cuenta por autoridades, comerciantes y consumidores para su ejecución, ante la cruel realidad de tener mercados en pésimo estado y sin ningún criterio referente a normas medioambientales.

Esperemos que esta reflexión sea tomada en cuenta por todos los involucrados, lanzando este reto principalmente a las autoridades y dirigentes de los sindicatos que albergan a los comerciantes.

Fuente: LA PATRIA