"Huari con miel 100% natural de abejas"

Por una tradición más que centenaria Huari, Oruro y la cerveza están ligadas a los años de las buenas costumbres. Después de un buen fricasé de llama o de unas costillitas de oveja o de otro gustito gastronómico, los sibaritas suelen apelar o como aperitivo o culminación de la comida a unos buenos sorbos de Huari, la cerveza que nos acompaña desde 1877, tan centenaria como éste viejo periódico que en poco tiempo más también cumplirá cien años. Ambos corren vidas paralelas, historias casi parecidas, aportando al desarrollo regional. Oruro sin Huari, no es Oruro, es como decir Oruro sin "San José", el equipo de los mil amores da todos los orureños.

Nos ocupamos de la cervecería por haber lanzado al mercado, aunque en fabricación limitada, su nuevo producto; cerveza con miel de abejas, que por gentileza de los buenos amigos del "Daly" Oruro pude degustarla aquí en la "Llajta", muy fría; buen sabor. El perfume a miel se aprecia al olfato y en el paladar se desliza con comedida dulzura, y hasta se dice que es medicinal por la temporada invernal para combatir los resfríos.

Hasta ahí todo está bien. Lo que no encaja es la novedosa etiqueta con su desplegable; "Huari con miel 100% natural de abejas", suena a algo así como; "se vende sombreros para caballeros de paja" o "necesito cocinera cama adentro que me lave la ropa y la cosa". Bueno son gajes del oficio, del apresurado "merchandising." Es mejor casar al atributivo con el sustantivo; ´Huari con miel de abejas 100% natural", así se entiende mejor, pero no hay problema, el cometido se ha cumplido; comunicar, eso es lo efectivo, aunque a las volanderas y en perjuicio de un buen ritmo del idioma que es común a nosotros, y hay que cuidar aquello.

Con su brillante etiqueta, hace un par de años renovada por recomendación de las técnicas del marketing, mantiene al épico "Grambinus", un rey mítico germánico del cual se sabe muy poco, sino como un héroe de las leyendas e icono universal de la cerveza, montado en un tonel celebrando la jovialidad. La iconografía le presenta flanqueado por dos espigas de la lamentablemente desaparecida cebada, en otra mentirejilla "marketinera", aunque piadosa o bromista, ya que la Huari ahora usa el arroz para los fermentos. A veces confundido con un santo patrón, sin que sea uno de ellos ni una deidad, en las tradiciones legendarias se le atribuye la invención de la cerveza, y entre los fabricantes hay quienes le atribuyen poderes especiales para bendecir su trabajo, y de ahí que evocarlo en algunas ocasiones especiales se ha hecho una secreta costumbre dentro un círculo cerrado de esos industriales.

La cerveza filtrada con miel es un producto que tiene sus antecedentes en aquellas remotas formas artesanales de fabricar vino de miel o hidromiel, una de las bebidas alcohólicas más antiguas en la historia de las bebidas espirituosas. Se dice que hace 4.000 años, en la antigua Babilonia, existía una costumbre matrimonial. Cuando un hombre y una mujer se unían en matrimonio, el padre de la novia se comprometía a proveer, a quien desposara a su hija, de toda la cerveza de miel que pudiera tomar durante un mes. En aquellas épocas, el año, se medía según el calendario lunar, y un mes duraba lo que duraba una luna.

Con esta costumbre se aseguraba la fertilidad de la pareja, tan apreciada en los viejos tiempos, además de desinhibir a los novios debido a sus supuestas propiedades afrodisíacas�?Nace así lo que hoy se conoce como Luna de Miel.

Entre nosotros esta costumbre esta también arraigada, matrimonio que venga, hay que celebrarlo con mucha cerveza. Es costumbre que cada uno de los invitados lleve no menos de "diez cajitas" a la fiesta de matrimonio, y no hay otra bebida tan popular que pueda desplazarla en los carnavales.

RECETA CONTRA LOS RESFRÍOS

Se dice que beber cerveza caliente es un buen remedio muy bueno para los resfriados. En efecto, la cerveza caliente mejora la circulación sanguínea y la respiración, ayuda también contra los dolores articulares y refuerza el sistema inmunológico. ¿Cómo se hace? Caliente una botella de cerveza al baño maría y añada cuatro cucharaditas de miel. Aunque la receta funciona mejor si es con cerveza de cebada. Pregunte a su médico antes de experimentar por su cuenta.

Periodista