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Jueves 18 de febrero de 2016

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Ecológico Kiswara

Editorial

Césped sintético vs. natural

18 feb 2016

Fuente: LA PATRIA

El Presidente del Estado Plurinacional de Bolivia ha entregado a lo largo y ancho del país, canchas con pasto sintético; siguiendo su ejemplo, el alcalde de Oruro encargó la tarea de cubrir varias jardineras de la ciudad con el mismo material, lo cual ha comenzado a generar reacciones diversas entre los ciudadanos, algunas de preocupación y otras de aprobación.

El uso del césped sintético tiene sus ventajas y desventajas.

Una de las ventajas es que no necesita ser regado y cortado cada cierto tiempo, por lo que resulta práctico en algunas ocasiones, el jefe de la Unidad de Paisajismo y Forestación del Gobierno Autónomo Municipal de Oruro (GAMO), Freddy Flores, explicó que ésa es la razón por la que se colocó pasto sintético en algunas zonas de la urbe, carentes de tomas de agua, además para evitar que los encargados del mantenimiento de las jardineras, en avenidas de alto tráfico vehicular, sufran accidentes.

Pero como todo, el césped artificial también tiene sus aspectos negativos, entre ellos su vida limitada, hay que realizar limpieza periódica, el uso de petróleo y productos químicos tóxicos en el relleno, por lo que preocupa la influencia nociva en la salud de las personas y del medio ambiente.

Otra de las inquietudes que existe entre los ciudadanos es el escaso contacto que hay ahora de los niños con la naturaleza, la cual es esencial para la vida y el desarrollo saludables de los infantes.

Por otra parte, se pide a los vecinos que eviten llevar a sus mascotas a los parques y otros lugares donde se ha colocado el pasto artificial, pero los animales, al igual que los humanos, necesitan cierto contacto con la naturaleza.

No se pueden seguir creando selvas de cemento y pasto sintético, que aunque se ve bien, lo que necesita el planeta es más naturaleza, se necesitan árboles y plantas para lograr revertir en algo el cambio climático y otros fenómenos relacionados a la contaminación reinante en el planeta.

Lo que se necesita, al menos en un lugar como Oruro, es plantar más árboles, para que el clima adquiera humedad y exista mejor oxigenación del ambiente, los niños precisan ensuciarse, tocar la tierra, subirse a los árboles, mojarse en los charcos de lluvia, porque eso no sólo mejorará su salud física, sino también la espiritual y reforzará en los pequeños su compromiso con la naturaleza y su cuidado.

Fuente: LA PATRIA
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