Tener fe

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Solemos escuchar "la fe mueve montañas", algunas personas le dan bastante significado, sin embargo, otras no demuestran fe hacia algo o alguien, cuando una persona tiene fe significa que deposita su absoluta confianza en alguien, y si la gratitud crece también crece la fe.

Muchas veces el individuo comienza a tener fe cuando pudo salir de alguna adversidad, es entonces cuando crece su fe y se solidifica sus creencias, tener fe es aceptar los designios de Dios por ejemplo para todas aquellas personas que son católicas.

Tener fe es crecer cuando resulta más fácil recurrir a la duda, cuando uno tiene fe acostumbra guiar sus pasos no con la vista sino con el corazón, la mente se bloquea cuando uno más necesita tomar una decisión, pero el corazón sólo necesita un rayo de esperanza.

Tener fe también implica que la persona arriesgue muchas cosas para conseguir o cumplir los objetivos que se propone, en la vida no se pueden obtener las cosas fácilmente sin que implique un poco de sacrificio o que se valore lo que se tiene.

En momentos de tristeza, no se debe perder la fe, aun cuando parezca que nada tiene solución o que un problema viene tras otro tener fe es buscar lo imposible, sonreír cuando uno está en momentos difíciles o levantar la mirada aun cuando estén cansados de tanto llanto.

La fe debe permanecer en cada momento de nuestras vidas y no demostrarla en algunas épocas del año o cuando sentimos que los problemas nos atosigan, tener fe no significa que deba ser demostrada hacia los demás o que uno actúe por el qué dirán.

Nos encontramos en una época del año en la que la fe es aún más fuerte dirigida hacia la Virgen del Socavón, principalmente por los danzarines que le ofrecen su baile haciendo promesas o por gratitud por haber cumplido algo en sus vidas, pero no olvidemos distorsionar el verdadero significado de la fe, en la esencia de las personas debe permanecer siempre la humildad para aceptar lo que no se pueda cambiar y para afrontar con firmeza momentos difíciles con la suficiente fe.