Jueves 07 de enero de 2016
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Editorial y opiniones
L谩grimas que hablan del valor de una mujer
07 ene 2016
Aquilino Pedro Mu帽oz Mej铆a
Hace un tiempo habl谩bamos de una sociedad marcada por la herencia patriarcal, donde los roles de la mujer eran muy de hogar, de servicio al hombre y a los hijos, pero de un tiempo a esta parte esta percepci贸n evolucion贸, lamentablemente sin mostrar mejoras para la imagen de la mujer, puesto que hoy en d铆a la mujer es considerada un objeto adorno, esclava de una imagen sexual perfecta cuyo papel es mantener a la familia y "tener contento a su hombre", aunque ello signifique negarse a s铆 misma solo para que su descendencia sea "feliz"; para algunos hombres resulta poco m谩s que imposible entender que la mujer es un ser humano y que como tal, tiene dignidad y merece respeto, claro que ellos se preguntar谩n 驴respeto? 驴Por qu茅?; si soy yo el que mando en mi hogar? D茅jenme compartir con ustedes mis fan谩ticos amigos, una historia que muy recurrentemente se repite en nuestro diario peregrinaje en esta ef铆mera vida.
"Estuvimos casados casi 40 a帽os y hoy me deja llorando su ausencia"? me dijo un hombre con los ojos llenos de l谩grimas; su esposa hab铆a muerto despu茅s de haber padecido una enfermedad por casi seis meses.
"No s茅 qu茅 voy hacer ahora sin ella"; complement贸 con una incierta mirada a su futuro.
"隆No me dejes, quiero irme contigooo...!" fue el acongojado grito de un esposo que nunca m谩s volver谩 a ver ni o铆r a su compa帽era.
Este fue el desgarrador cuadro funerario de cuyo desenlace fui silencioso testigo, cuando asist铆 al entierro de una se帽ora, que en vida fue esposa, madre, amiga y vecina.
Ante semejante expresi贸n de dolor, me naci贸 una pregunta: 驴C贸mo es posible llorar tanto por una persona que al principio era una desconocida, ajena a todo lo que ese hombre viv铆a?
Trat茅 de explicarlo con la ayuda de las matem谩ticas siguiendo el siguiente razonamiento: esta pareja inici贸 su matrimonio hace 39 a帽os, el esposo ten铆a en aquella 茅poca 34 a帽os y la se帽ora 32 a帽os, tomando este par谩metro comparativo, a la fecha podemos decir que: vivieron con sus familias (pap谩, mam谩, y hermanos) un promedio de 33 a帽os, en cambio vivieron como pareja 39 a帽os. 驴Verdad que hay mucha diferencia? Pero, si seguimos este razonamiento, concluiremos que la uni贸n de esta pareja estaba consagrada por una mera costumbre, sin tomar en cuenta los sentimientos? y definitivamente no es as铆.
Su acongojado llanto, su expresiva desesperaci贸n, la pena y angustia que a raudales desbordaban su mirada y su rostro, definitivamente expresaban sentimientos, que forjaron lazos de uni贸n con su pareja, tan fuertes que este quiebre provocado por la muerte de ella, desembocaron en expresiones de tan inmenso dolor.
Nuestra reflexi贸n se dirige a la valoraci贸n de la mujer como una persona, compa帽era y receptora de todos los sentimientos m谩s puros que, como hombres, podemos ofrecer a una dama; en contrapartida de una sociedad que ve a la mujer como un objeto ornamental, sexual, de gozo y placer moment谩neo.