Seguridad vial en carreteras

El último año cerró con un saldo lamentable de muchas víctimas fatales y una cantidad preocupante de heridos, unos más graves que otros, añadiéndose una cuenta negativa para empresas y propietarios del transporte, todo por una preocupante cadena de accidentes en varios tramos carreteros del país.

La suma de muertos bordea el centenar y la de heridos casi triplica esa suma por lo que el hecho se plantea como un serio problema que debe ser atendido con la seriedad que amerita el caso, considerando que las carreteras han sido escenario de fatales accidentes, una mayoría entre noviembre y diciembre pasados.

Como siempre sucede en estos casos, las causas están en investigación, las autoridades de Tránsito tuvieron intenso trabajo, por supuesto del más doloroso y molestoso, atendiendo los choques, que fueron más y algunos vuelcos que completaron el listado de hechos de tránsito, todos muy preocupantes.

Ante la frecuencia de los hechos salió al frente la Administradora Boliviana de Carreteras (ABC) disponiendo una campaña en las terminales de transporte bajo el rótulo de "Viaje Seguro". La finalidad del programa de prevención orientar sobre las medidas de seguridad a tiempo de iniciar un viaje, utilizando los servicios de las flotas con destinos diferentes en el país.

Una de las principales recomendaciones de la ABC, es no rebasar los límites de máxima velocidad establecidos para carreteras asfaltadas en 80 kilómetros por hora (kph) y en caminos de ripio sólo 70 kph. Lo que se comprueba es que los omnibuses de pasajeros viajan a 100 kph, pese a tener algunos un control interno que advierte sobre tales excesos. Camiones de alto tonelaje y bastante cargados sobrepasan los 70 kph, mientras que conductores de vehículos particulares transitan a más de 150 kilómetros por hora. Todos transgreden las normas vigentes y no hay autoridad que regule y sancione esa flagrante infracción.

La ABC dentro de sus atribuciones y cuidando por la seguridad de personas, advierte a los conductores en general, transitar en tramos en reparación a mínima velocidad, mientras que les exige respeto a las recomendaciones eventuales. A propósito del último tema, conductores en general, se quejan porque la señalización en las carreteras es "deficiente".

A todo esto y ponderando la preocupación de la ABC por prevenir accidentes, aunque deberá mejorar sus sistemas de señalización, el hecho más preocupante es la ausencia de la Policía Caminera en las diferentes rutas del país y sobre todo en esas carreteras en las que por el intenso tráfico que se produce diariamente se hace necesario un control permanente de este organismo policial.

Nadie que no sea la unidad respetiva de la Policía puede regular la velocidad en las carreteras, son efectivos de esa unidad especializada que deben controlar mediante sus equipos especiales, el paso de movilidades y la velocidad en que lo hacen, advirtiendo que si exceden los límites previstos, esos vehículos deben ser interceptados y sus conductores sancionados drásticamente, los reincidentes con doble sanción y hasta con alternativa de perder su licencia de conducir.

La campaña de la ABC, es parte, mínima de una campaña que debería desarrollarse con mayor amplitud, pero sobre todo con presencia física de efectivos y motorizados de la Policía Caminera, única manera de disminuir y en su caso evitar más accidentes de tránsito con dolorosas y costosas consecuencias.

Fuente: La patria