Aparato estatal en pleno da luz verde al referéndum para reelección de Evo

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Los �rganos Ejecutivo, Legislativo, Judicial y Electoral, trabajaron para que el país vaya a las urnas en febrero próximo a decidir si Evo Morales puede o no seguir postulando a la Presidencia.

Después de haberlo negado sistemáticamente, el Presidente Evo Morales finalmente este 2015 admitió que buscaría una nueva reelección, aunque aclaró que lo hacía para atender al pedido del pueblo.

Los cuatro órganos del Estado se movilizaron para dar vía libre a la reforma constitucional que será sometida al voto popular en un referéndum que se celebrará en febrero próximo.

En el tiempo récord de mes y medio (entre el 22 de septiembre y el 5 de noviembre) se aprobó la reforma constitucional y la Ley de Convocatoria al Referéndum, tiempo en el que, además, intervinieron el Tribunal Constitucional y el Tribunal Supremo Electoral para avalar el proceso.

En septiembre se activó el mecanismo con los movimientos sociales agrupados en el Consejo Nacional por el Cambio (Conalcam), que elaboraron la propuesta de reforma constitucional en coordinación con el �rgano Ejecutivo. De esa manera, la raíz del pedido de una nueva reelección salía de las entrañas del pueblo. Luego, el �rgano Legislativo aprobó, sin mayores sobresaltos, la reforma que le permitirá al presidente Morales postular a un cuarto mandato (2020-2025).

La reforma, sin embargo, fue enviada en consulta al Tribunal Constitucional, por lo que también se activó el �rgano Judicial. Esta instancia, luego de pedir ajustes de forma, dio luz verde a la reforma constitucional.

En paralelo, la Asamblea Legislativa aprobó la convocatoria al referéndum, mediante otra ley, que también fue puesta a consideración del Tribunal Constitucional y aprobada sin ninguna observación.

El 5 de noviembre, ante el coincidente viaje del Presidente Morales y el vicepresidente García Linera, José Alberto Gonzáles, presidente del Senado, promulgó la Ley de Convocatoria al Referéndum con la advertencia de que se está poniendo en juego la vida misma y con ella, la patria.

La oposición intentó, sin éxito, frenar la reforma constitucional mediante encendidos y largos debates en la Asamblea Legislativa, así como con recursos legales que no prosperaron. El último intento fue ejercitado por el senador Oscar Ortiz, quien envió una denuncia ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos de la OEA para anular este proceso.

Mientras estos procedimientos seguían su curso, las opciones por el Sí y por No se convertían en una frenética campaña, sin que el TSE pudiera emitir ninguna amonestación porque no había sido notificado oficialmente con la Ley de Convocatoria al Referéndum.

El MAS inició su campaña aprovechando el fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya, que se declaró competente para tratar la demanda marítima. En ese contexto, los ex presidentes que cooperan en la causa marítima, Carlos Mesa y Jorge Quiroga, rechazaron la pretensión del mandatario de buscar una nueva reelección, que le permitiría permanecer en el poder hasta 2025, es decir, 19 años continuos.

La campaña por el No también fue tomando forma. Los opositores Rubén Costas y Samuel Doria Medina marcaron distancia y dijeron que será la ciudadanía la que lidere esta opción.

En ese marco, el alcalde de La Paz, Luis Revilla, junto a un grupo de ciudadanos destacados, entre ellos la periodista Amalia Pando, decidieron unirse para emprender la campaña por el No a la reelección de Evo Morales.

Así las cosas, la mesa está servida para la pugna electoral.