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Jueves 17 de diciembre de 2015

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Ecológico Kiswara

¿Qué pasó con nuestro lago Poopó?

17 dic 2015

Fuente: La Patria

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Una vez que la noticia sobre la sequía en el lago Poopó, está dando vueltas por el mundo, ahora corresponde asumir acciones concretas, ya no discursos, ni papeleo tras papeleo, en procura de recuperar éste patrimonio orureño, si es que eso posible.

Ante la prueba contundente que LA PATRIA difundió a través de fotografías y un vídeo registrado en un sobrevuelo, la primera reacción del gobernador Víctor Hugo Vásquez, fue una respuesta tranquila en sentido que no debíamos preocuparnos por éste desastre ambiental. ¿Dónde queda el discurso gubernamental que apunta a la defensa de la Madre Tierra?

El martes reciente la autoridad realizó un sobrevuelo, para "constatar" lo que pasó en lo que fue el segundo lago más importante de Bolivia, después del Titicaca y según imágenes difundidas a través de las redes sociales su comentario estando en el aire fue "se ha secado, se ha secado hermano", a su retorno ya en tierra reconoció que la situación es preocupante, pero que no era el momento de buscar culpables.

Por versiones de los comunarios y según alguna bibliografía, el lago tenía ciclos en los que se secaba, pero no en la magnitud de lo ocurrido ahora. Existen versiones diversas a las que se atribuye la desaparición de 3.200 kilómetros de agua, que fueron sustituidos por arena, arcilla y salitre.

Se habla del calentamiento global, la contaminación del agua ya sea por la minería y el depósito de una diversidad de desechos generados por la población, o el desvío de aguas del río Desaguadero, principal afluente del lago y que une a los lagos orureños, Uru y Poopó con el Titicaca, fuente lacustre compartida entre Bolivia y Perú.

Lo que es cierto es que no hay vida en el lago desde donde en sus mejores épocas se extraían hasta 3.600 toneladas métricas de pejerrey por año, ahora no hay ni uno. También desaparecieron las parihuanas, los patos silvestres, garzas, martines pescadores, ispis, bogas y otras especies acuáticas; en su lugar ahora vicuñas, llamas y algunos rebaños de ovejas se desplazan por la planicie.

El equipo periodístico de LA PATRIA que realizó la investigación sobre este desastre ambiental, contó con el apoyo del Centro de Ecología y Pueblo Andinos (CEPA), quizá la única institución que desde hace varios años está dedicada a realizar estudios sobre la contaminación y alertó de los riesgos que amenazaban a éste lago.

Fuente: La Patria
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