El pasado 20 de septiembre La Paz, Oruro, Chuquisaca y Cochabamba sometieron al voto ciudadano la aprobación o no de sus estatutos autonómicos, tras el ejercicio democrático en estos distritos se impuso el NO, aunque es bueno explicar que coincidentemente la causa principal fue el rechazo a un documento propiamente "desconocido" para la colectividad ya que fallaron los mecanismos para su adecuada "socialización", aparte de algunas otras observaciones más puntuales en función de intereses regionales.
La circunstancia sirvió para conocer la inmediata reacción oficial tras el resultado desfavorable a la expectativa política oficial, desde el Ejecutivo se señaló que "esas regiones, prefieren un Estado centralista", en referencia a los cuatro departamentos que fueron al referéndum, sin embargo la apreciación es alejada de la realidad, particularmente en el caso de Oruro, ya que si existe una marcada preocupación es precisamente la alta dependencia del poder central como causa que frena el desarrollo regional.
En algún momento y en el fragor de las discusiones en torno a la elaboración del texto autonómico, salió una frase considerada ofensiva para los orureños, cuando se señaló que "Oruro era el patio trasero de La Paz y del palacio" apreciación que fue rechazada airadamente, pero?se la admitió en el contexto real de algunos hechos que muestran a Oruro suplicando soluciones a sus problemas y recibiendo muchas promesas y pocas realizaciones.
El mes pasado la Asamblea Legislativa del Beni aprobó su Estatuto Autonómico luego de haber sido adecuado a la nueva Constitución y ha sido enviado al Tribunal Constitucional Plurinacional (TCP) para su control de legalidad, faltando tan sólo la promulgación por parte de su Gobernación.
Hay que recordar que el Beni, junto a Santa Cruz, Tarija y Pando ya fueron a referéndum, por lo mismo ya no corresponde cumplir esa instancia, lo que ahora corresponde es que el documento sea analizado en el TCP y luego retorna a la fase final en la Asamblea Legislativa Departamental. De todos esos trámites se confirma que sólo Tarija y Pando concluyeron todas las etapas y tienen en vigencia sus estatutos.
El análisis de situación en la actualidad muestra indudablemente una situación preocupante, pues con el NO en el referéndum parecería que se acabó el tratamiento de ese importante documento que debe establecer las condiciones más apropiadas para definir las políticas departamentales que tienen que ver con un verdadero desarrollo sostenible, en tiempo y espacio, debidamente respaldado por las condiciones más apropiadas, debidamente aprobadas por las instancias de representación regional a través de todas las instituciones, para adecuar el futuro de Oruro al cumplimiento de sus objetivos y metas propuestas que serán sólo resultado del buen manejo de sus recursos naturales, de sus opciones en materia de diversificación productiva y que avanzarán con decidido impulso colectivo.
Lo que hace falta en nuestro medio es que la Asamblea Legislativa Departamental siga trabajando en la readecuación del Estatuto Autonómico, en el marco de un proceso democrático e incluyente, eso significa abriendo ampliamente el análisis a todos los sectores de la orureñidad, para tener luego un documento de consenso que muestre la voluntad de los estantes y habitantes en ésta tierra que tiene todas las condiciones para encarar su desarrollo, sin depender de circunstancias políticas.
Hace falta dinamizar otra vez la consideración del estatuto, modificarlo, adecuarlo, enriquecerlo y aprobarlo en la instancia de mayor representatividad departamental para ejercer luego el derecho de fijar las metas de nuestro verdadero crecimiento.
Fuente: La Patria
Para tus amigos:
¡Oferta!
Solicita tu membresía Premium y disfruta estos beneficios adicionales:
- Edición diaria disponible desde las 5:00 am.
- Periódico del día en PDF descargable.
- Fotografías en alta resolución.
- Acceso a ediciones pasadas digitales desde 2010.