Se trata del operativo más reciente de la Aduana Nacional, ejecutado de manera conjunta por el Control Operativo Aduanero (COA) y cooperación de las Fuerzas Armadas, en una localidad paceña con un decomiso de mercaderÃa avaluada en casi medio millón de dólares, considerado como el "decomiso histórico" del organismo represor del contrabando.
Según la presidenta de la Aduana Nacional de Bolivia, se trata del caso más grande que cumplió la Aduana en toda su historia, por el valor de la mercaderÃa incautada que suma 3.102.503 Bs y significa un valor CIF (en frontera) de 445.762 dólares, en un solo camión y en un solo operativo.
Sucedió en la localidad de Achiri, pleno altiplano paceño y transitó antes por la población de Charaña, donde habrÃa sido detectado el enorme camión que transportaba centenares de equipos de computación, entre impresoras Canon, monitores, laptops, una enorme cantidad de accesorios, tarjetas madre, discos duros, punteros láser, videos, procesadores, parlantes, tóners y buena cantidad de repuestos para los mismos equipos.
Realmente se trata de un duro golpe al contrabando, presumiblemente un embarque realizado por un consorcio de comerciantes, o como definen los que saben del negocio, una sociedad de millonarios contrabandistas.
Algo interesante es que en el operativo cumplido no se produjeron incidentes mayores, como suele suceder con la defensa que ejercen los comerciantes de su mercaderÃa e incluso con la ayuda de pobladores de ciertas comunidades donde los traficantes de mercaderÃa ilegal tienen sus centros de acopio y al mismo tiempo de reabastecimiento. Algunas poblaciones prohibidas a efectivos aduaneros. En el caso presente, el chofer y el ayudante, resultaron los únicos detenidos y de inmediato no se efectuó reclamo alguno, aunque por el valor de la retención aduanera, con seguridad que aparecerán los "dueños" de la mercaderÃa.
Es impresionante la cantidad de mercaderÃa que se mueve en nuestro territorio, procede de puestos chilenos y se vencen algunos controles aduaneros sin dificultades, por lo menos eso se observa cuando los operativos se ejecutan al interior de nuestras fronteras y con suerte alcanzan el objetivo de frenar en parte el ilÃcito negocio de un masivo contrabando, que particularmente daña nuestra economÃa al generarse una millonaria evasión de impuestos.
Con inusitada frecuencia se cuentan por toneladas los decomisos de centenares de ropa usada, de mercaderÃa de la lÃnea blanca, cocinas, lavadoras, refrigeradores o los equipos de sonido, televisores, y una variedad de productos suntuarios, como fantasÃa, bisuterÃa o gran cantidad de telas y ropa nueva, es decir que pese a los operativos del COA, los comerciantes se ingenian para eludir controles y llegar a las ciudades con sus millonarios cargamentos.
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