Discurso inaugural de Mons. Oscar Aparicio a la Asamblea de la CEB

El 5 de noviembre de este año 2015 Monseñor Oscar Aparicio, Arzobispo de Cochabamba y Presidente de la Conferencia Episcopal Boliviana (CEB), inauguró la centésima Asamblea de Obispos en Cochabamba con un discurso que a continuación resumimos. Después de saludar a todos los Obispos y colaboradores presentes, pidió a Dios por la salud del Cardenal Julio Terrazas en Santa Cruz.

Mons. �?scar recordó de manera especial a dos sacerdotes bolivianos recientemente fallecidos: el P. Pancho Flores, ex-Secretario Adjunto de la CEB, y el P. Crispín Borda, Rector del Seminario de San Luis, al que reconoció su gran servicio en la formación de los futuros sacerdotes. Luego se refirió a la reciente visita pastoral del Papa Francisco que ha dejado una huella profunda. Recomendó leer íntegramente los mensajes papales que orientan en la construcción del país y de la Iglesia.

Entre los problemas más lacerantes en Bolivia Mons. Oscar mencionó la situación económica, la escasez de fuentes de trabajo, el caótico estado del tráfico vehicular en las ciudades, la deficiente calidad educativa en los centros educativos, el lamentable estado de la atención de salud, el consumo de alcohol en las ciudades y la violencia que conlleva, la drogadicción y el narcotráfico, la inseguridad ciudadana y el deplorable estado de nuestra justicia. Igualmente denunció la discusión política, ideológica, la búsqueda del poder por el poder, que "llenan todos los espacios de preocupación y diálogo y desplazan a los verdaderos problemas".

Por ello recomendó que todos los medios de comunicación, actores sociales, autoridades, Iglesia y toda la sociedad boliviana reflexionemos sobre lo que realmente preocupa a la sociedad boliviana y nos pongamos en búsqueda de caminos de superación. "Primero son los problemas de la gente y después las ideologías".

Mons. Oscar se refirió también al deseo del Papa para agilizar los trámites de nulidad del matrimonio. "Algunos interpretaron que la Iglesia ya permitía el divorcio y eso no es así. Como ha aclarado el Santo Padre, el sacramento del matrimonio une al varón y a la mujer con una unión indivisible y, por tanto, para siempre". Mons. �?scar indicó que, siguiendo la petición del Papa cada Iglesia local debe ayudar pastoralmente a tantos matrimonios que no se realizaron correctamente por diferentes motivos. "�?ste tema nos invita a todos, sobre todo a los agentes de pastoral familiar y a los sacerdotes a mejorar nuestros itinerarios de formación para la celebración del sacramento del matrimonio y a acompañar mejor a los matrimonios. El matrimonio es la base de la familia. Si el matrimonio no funciona, la familia no funciona".

Mons. Oscar también se refirió al aborto impune que de manera sutil ha sido promovido en Bolivia por el Tribunal Constitucional Plurinacional con su sentencia de febrero de 2014 y sobre todo por la Resolución del Ministerio de Salud en enero de este año que aprueba el Reglamento para el procedimiento técnico, exigiendo que a la sola presentación de la denuncia el aborto se realice en 24 horas.

Mons. Oscar desvela valientemente la cultura de la muerte que se va imponiendo en Bolivia con el impulso de algunas ONGs abortistas bajo la capa de compasión ante casos extremos. Detrás de todo ello hay poderosos intereses económicos.

Por eso hace una llamado a las mujeres, "a las que como Iglesia acompañamos, escuchamos y animamos, a no dejarse engañar por propagandas que incitan a la compasión, cuando en el fondo esconden negros intereses". Mons. Oscar clama para que se ponga en vigencia el derecho humano a la objeción de conciencia, ya que los centros de salud están siendo obligados a realizar abortos, violentando sus principios morales y creencias religiosas,.

También el Obispo recordó el inicio del año jubilar de la misericordia, el próximo 8 de diciembre, como un regalo del Papa Francisco. "Debemos programar personalmente, en cada familia, en cada parroquia y en cada una de nuestras iglesias locales este gran acontecimiento. ¿Quién no necesita ser perdonado? ¿Quién no necesita una nueva oportunidad? ¿Quién no necesita volver a empezar? Jesucristo, redentor del ser humano, es la nueva oportunidad para la humanidad, porque es el perdón".

Terminó Mons. Oscar pidiendo a los jóvenes para que escuchen la llamada de Cristo a la vida sacerdotal y religiosa: "Y todo el que haya dejado casas, o hermanos, o hermanas, o padre, o madre, o hijos o tierras por mi nombre, recibirá cien veces más, y heredará la vida eterna" (Mt 19,29).