No conocen aguinaldo

Permanentemente el gobierno va anunciando que se pagará el doble aguinaldo a los trabajadores, como propaganda electoral, que bonito suena, pero no llegará a todos, esa es la realidad de nuestro país. Según algunos economistas se pagarán solamente a una minoría de la población boliviana.

El doble aguinaldo, para sectores laborales es beneficioso, es positivo, lo negativo es que no llega a todos los trabajadores, mucha gente ni siquiera conoce el primer aguinaldo, la forma de vida que lleva nuestra gente en el ámbito económico es desigual, gente desocupada, no hay fuentes de trabajo, los egresados de las universidades, de las normales, no encuentran un lugar donde trabajar y si encuentran es un trabajo eventual, ni pensar en los beneficios sociales, peor la seguridad de salud, además con un salario por debajo del mínimo nacional.

La mayor cantidad de trabajadores informales están aproximadamente alrededor del 80 por ciento de la población boliviana, donde todo vale y el Estado no interviene. Las empresas pequeñas no están en condiciones de pagar, por falta de mayor productividad y corren el riesgo de cerrar sus empresas y despedir a sus trabajadores.

No se menciona a los ex trabajadores, llamados jubilados que no tendrán un doble aguinaldo, porque ya no aportan divisas al Estado, antes estos trabajadores pertenecían a sectores productivos, han aportado para la economía del país, ahora para el gobierno ya no sirven, ya no aportan nada al Tesoro General de la Nación. A estas personas de la tercera edad o adulto mayor, permanentemente se les va discriminando, reciben malos tratos de parte de algunas autoridades que están en función de gobierno, manifiestan que las personas de 60 años deben jubilarse, porque ya no son útiles para la sociedad, seguimos con esos pensamientos negativos de la política neoliberal salvaje, sin embargo en sus discursos dicen que han derrotado a la política neoliberal, cuando está presente en las actitudes de muchas autoridades.

Tenemos mucha gente que se ha dedicado a un trabajo informal, en muchos casos no conocen el primer aguinaldo, ni mucho menos el segundo, mucha gente es explotada, tienen que callar por no ser retirado de su trabajo eventual, tiene aguantar lo que se les paga, no pueden denunciar, porque pierden su fuente de trabajo.

A escasos metros de la plaza principal ocurre explotación de jóvenes, por parte de algunos empresarios, trabajando de lunes a domingo sin que tenga reconocimiento económico, si se quejan, reciben amenazan de despido, les gritan, ofendiéndoles a su personalidad. Cuando se habla de aguinaldo, significa inestabilidad de su trabajo, hay mucho temor de muchos jóvenes por denunciar y conocen las autoridades lo que ocurre con algunos empresarios.

Tenemos gente que va deambulando por conseguir algunos centavitos, para el pan del día, que vienen de regiones aledañas de la ciudad de Oruro, están mendigando junto a sus hijos, no hay institución que les pueda atender. Para mucha gente, el doble aguinaldo es un lujo.

Cuando se quiere postular a trabajos de la administración pública, tienes que rezar el lenguaje de quienes están en el poder, lo contrario no es posible acceder a estos lugares, es privilegio de quienes han ganado las elecciones. Los trabajadores bolivianos merecen un incremento salarial de acuerdo a las demandas reales, para compensar su esfuerzo y sacrificio, pero no caer en la enorme discriminación de muchos trabajadores de Bolivia.

Todavía existe gente privilegiada que recibirá doble aguinaldo elevado y tenemos gente que no tiene el pan para llevar a la boca, la desocupación, la miseria, el hambre, seguirán deambulando por las calles de la ciudad, esperamos que las autoridades realmente planifiquen y eviten la discriminación, el sectarismo en la administración pública. En el siglo XXI ya no es conveniente el pensamiento único, cada grupo social tiene derecho a opinar, a vivir, se debe aceptar sus diferencias individuales, de grupos sociales, se debe tener consideración a la gente pobre, desechar toda forma de vanidad y soberbia, es necesario políticas públicas para elevar el nivel productivo de nuestro país.