¿Fotos en alta resolución?, cámbiate a Premium...
"Las culturas débiles, siempre han sido conquistadas por culturas que poseen ejércitos más fuertes. El trabajo de un guerrero es mantener la paz, y para ello siempre debe estar listo para la guerra", son palabras de Robert Kiyosaki, autor del best-seller Padre rico, padre pobre, en su libro, del cual es co autora su hermana Emi, Hermano rico, hermana rica.
Pese a esas palabras, Kiyosaki se declara a favor de la paz, por la cual, dice, está dispuesto a pelear, aunque suena algo contradictorio y bizarro. Este personaje fue a luchar a Vietnam, mientras que su hermana Emi escogió el camino de la paz y se hizo monja budista, sin embargo ella, en el mismo libro, halla algo de razón en las palabras de su hermano acerca de pelear por la paz, y él busca a su hermana para que le enseñe el camino de la paz espiritual; ambos aprenden uno del otro y complementan sus saberes para ir por la vida en busca de Dios, la prosperidad y la felicidad.
Leer más
El 2 de octubre se conmemoró, sin mucha estridencia, el DÃa Internacional de la No Violencia, que se instituyó en memoria del natalicio de uno de los representantes más sobresalientes del pacifismo en el mundo, Mohandas (Mahatma) Gandhi, quien logró la independencia de la India precisamente sobre la base de la filosofÃa pacifista y la estrategia de la no violencia, quien señalaba: "existen muchas causas por las cuales estoy dispuesto a morir, pero ninguna por la cual esté dispuesto a matar".
Según la resolución A/RES/61/271 de la Asamblea General de las Naciones Unidas del 15 de junio de 2007, la cual establece que la conmemoración del DÃa Internacional es una ocasión para "diseminar el mensaje de la no violencia, incluso a través de la educación y la conciencia pública". La resolución reafirma "la relevancia universal del principio de la no violencia" y el deseo de "conseguir una cultura de paz, tolerancia, comprensión y no violencia".
Pese a tan buenas intenciones, en el presente año la conmemoración llegó en medio de una situación terriblemente violenta para algunas naciones y personas como los ciudadanos sirios, quienes soportan una grave crisis, de la que muchos intentan escapar desesperadamente, y en esa tentativa frenética varios han perdido la vida.
De manera coincidente en México, el 2 de octubre, se conmemora la matanza de estudiantes en Tlatelolco, ocurrida el año 1968, hecho que hirió tremendamente a los ciudadanos, quienes con el transcurrir de los años mantienen vivo, en la memoria colectiva, el recuerdo de ese fatÃdico dÃa.
Sin ir lejos, en Bolivia, la conmemoración del 2 de octubre, dÃa de la No Violencia, nos encuentra con el siguiente panorama: casos como el de Chaparina, El Porvenir y otros, en los que se vivió extrema violencia, no se han resuelto.
Por otra parte, en la gestión pasada, 2014, se creó una medida para proteger a las féminas del maltrato y actos violentos, nace la Ley Nº 348 "para garantizar a las mujeres una vida libre de violencia", que en los hechos es casi un saludo a la bandera, pues a partir de la promulgación de la normativa la sociedad boliviana ha sido testigo de más de 70 casos de feminicidios, la mayorÃa continúa en la impunidad y, fueron resueltos dos o tres, con la sentencia de prisión para los agresores.
Sin embargo, ni las leyes, ni la prisión, han detenido a los violentos que siguen cometiendo actos que van desde las agresiones psicológicas, emocionales y de otra Ãndole, hasta llegar al maltrato fÃsico, que en muchos de los casos deriva en la muerte.
Y es que asà lo señalaban tanto Gandhi como el fallecido presidente de Sudáfrica, Nelson Mandela, la clave está en educar a nuestros niños y jóvenes en la cultura de la No violencia, "la educación es el arma más poderosa que puedes usar para cambiar el mundo", decÃa este último.
En Bolivia, la esposa del alcalde de La Paz, Maricruz Ribera, arquitecta de profesión y modelo cruceña, se percató de esta situación, decidió impulsar un programa que se enfoca en la prevención y no utiliza la palabra violencia, para empoderar a las niñas y hacer que sean lo suficientemente seguras de sà mismas, que se quieran, se respeten, no toleren bajo ningún punto de vista el maltrato, que se den cuenta que nacieron para ser felices.
El proyecto se denomina "Yo soy mi primer amor", por el que a través de juegos y dinámicas se enseña a las menores de 8 a 16 años a llevar una vida digna, a exigir respeto y buen trato de su entorno; a la vez, los padres son capacitados para que hablen el mismo idioma, es decir, que apoyen el trabajo que se realiza con las
niñas desde el ámbito familiar.
El programa, del que se busca que se convierta en una polÃtica pública y se disemine a lo largo y ancho de todo el paÃs, comenzó con las niñas, bajo el denominativo de "Yo soy mi primer amor", pero se planea también trabajar más adelante con los niños, quizás con otra denominación, para lograr una sociedad en la que ante todo se practique el respeto, la tolerancia, la no violencia.
Mandela ejercitó el perdón, cuando tras 27 años prisionero salió de la cárcel, decidió olvidar las afrentas recibidas de los afrikáners, colonos neerlandeses que sometÃan a los nativos al considerarlos inferiores por el color de su piel, porque comprendió que si guardaba rencor su espÃritu continuarÃa prisionero. "Si quieres hacer las paces con tu enemigo, tienes que trabajar con tu enemigo. Entonces él se vuelve tu compañero", dijo, y asà lo hizo, en lugar de despedir a quienes lo mantuvieron prisionero, lo humillaron y maltrataron, los perdonó y trabajó con ellos, logrando asà dar un ejemplo de dignidad y fortaleza que ayudó al pueblo sudafricano a superar sus odios y rencores.
En las Sagradas Escrituras se puede encontrar que Dios también nos manda a perdonar: "Nunca paguéis a nadie mal por mal", Romanos 12:17,19.
Por último, recordemos que el mismo Jesús, inspirado por Dios Padre, nos dejó un mandamiento primordial, AMAR, y dijo "amarás a tu prójimo como a ti mismo", Mateo 22:39, "no hay otro mandamiento mayor que éstos, ama a tus amigos, sobre todo ama a tus enemigos", Marcos 12:31.