Los niños fundadores del Anglo Americano aquellos que tuvieron un sueño llamado Anglo Americano
26 sep 2015
Edgar Beltrán Badani y Marcelo Fernández Iraola
"A horas diecisiete de la tarde del treintaiuno de enero de mil novecientos cuarenta y uno, no habiendo más alumnos que inscribir, procedimos a cerrar la matrícula de este año escolar?". "Firmamos el Señor Director y la que suscribe" (sic). El director que firmaba la apertura y el cierre de las primeras inscripciones del Anglo American School llegaría a constituirse en el primer director, el profesor Paul Hirsch, un refugiado de la persecución político ideológica que se vivía entonces en Europa, y era el que suscribía el acta de la inscripción de los primeros 12 alumnos (otros documentos históricos refieren 14 alumnos), junto a la preceptora Neptalí Gallo. Era el año 1941, y como podemos constatar por las actas de inscripción y las actas de notas, nuestro Colegio nacía solamente con dos cursos básicos, primero y tercero de primaria, faltando el kindergarten y el segundo de primaria.
En consecuencia, de acuerdo con los registros del primer Libro de Inscripciones del Anglo American School, los alumnos fundadores en Primer Grado fueron: Anita Horton, Leonardo Herzenberg (hijo del principal promotor de la fundación del Colegio), Billy MacLean, Margaret Smith y Mónica Lelikstrom. Los alumnos fundadores del Tercer Grado fueron: Juan Horton, Martha Koenig, Ulrich Knopfmacher, Bárbara MacLean, Lelilly Llisbuk y Herbert Jacobson.
Un par de meses antes, un grupo de padres de familia, a iniciativa de Don Roberto Herzenberg que se negaba a enviar a su hijo Leonardo al primer grado del Colegio Alemán, habían tomado la decisión de fundar el Centro Cultural Anglo Americano, cuyo postulado sería luego promocionar, patrocinar y conducir un colegio que, luego de varias opciones, tomaría el mismo nombre: el Anglo Americano, con el propósito de brindar a sus hijos una educación que no tuviera la influencia sectaria que se manifestaba entonces en el Colegio Alemán, producto del momento de la Segunda Guerra Mundial, en que la posición alemana conculcaba las libertades fundamentales de los hombres.
En los siguientes años escolares, se incorporarían al colegio contingentes importantes de alumnos cuyos padres tenían la misma visión de los fundadores, o que asimilaron el rápido prestigio que alcanzaba la nueva entidad educativa. Aquellos niños fundadores, de mente inocente en unos casos, medio o nada inocentes en otros casos por la fuerza de la circunstancia de la persecución nazi, llevaron en sus espaldas la misión de construir los cimientos de este gran colegio, pues por mucho que exista el maestro y apóstol de la enseñanza, no existe clase sin alumnos.
Pocos de aquellos niños pioneros de tan extraordinaria obra educativa, siguieron en el "Anglo" hasta concluir en sexto de secundaria y graduarse de bachilleres, pero dejaron cimiente feliz para quienes transitaríamos por las aulas en tiempos posteriores; y vaya paradoja, el único de aquellos niños fundadores que alcanzaría el bachillerato en el "Anglo", fue "Ulli" Knopfmacher, notable, porque graduándose de la prestigiosa Universidad de Berkeley, luego ejercería como docente en la mucho más prestigiosa Universidad de Princeton, alcanzando el extraordinario nivel de Profesor Emérito.
Ninguno de ellos echó raíces en nuestro querido Oruro, quizá por la naturaleza del trabajo de sus padres, o porque perseguían sus mayores sueños en tierras lejanas. Cuánta alegría y felicidad podría provocar en nuestra familia anglista encontrar el rastro y la huellas de aquellos niños fundadores. La mayoría de los padres de familia eran profesionales técnicos y/o empresarios extranjeros de las grandes empresas mineras de la época, especialmente de la Compañía Minera de Oruro, la de Hochschild, y de otras empresas extranjeras de diversa índole, que por lo mismo generaban movimiento de su personal hacia otras latitudes. Muchas de esas empresas dejaron de existir, algunas de ellas aportaban para el financiamiento del colegio.
El recuerdo sublime y lleno de gratitud, es para todos ellos, los padres de familia fundadores, el director fundador, y especialmente para los alumnos "los niños" fundadores, a quienes casi ni conocimos o no los conocimos definitivamente, ni personalmente; excepto por algunos contactos esporádicos gracias a las maravillas tecnológicas de nuestro tiempo actual; pero que sí, en realidad los conocimos personalmente por que "por sus obras los conoceréis", pusieron las piedras fundamentales de esta extraordinaria y maravillosa obra, de nuestro colegio, y?, fuimos los agraciados beneficiarios de ella. Esos niños pioneros, los fundadores y los que siguieron, soñadores de un colegio grandioso, habían comprendido en su inocencia, la filosofía de los padres y los maestros también fundadores, que "nada de lo hermoso y extraordinario, como el Anglo Americano, que sucede en este mundo, sucede sin antes haber sido soñado". A nosotros nos corresponde mantener aquel sueño, el del Anglo, que sea siempre el grande y diferente.
(*) Senior 66
Con datos y contenido extractados de Registros del Libro de inscripciones del Anglo American School, de la Revista The Anglo American School in the City of Oruro Bolivia in South America,
Editorial Don Bosco, La Paz Bolivia, 1954, página Web de Princeton University, Periódico estudiantil Blue and White.
Para tus amigos:
¡Oferta!
Solicita tu membresía Premium y disfruta estos beneficios adicionales:
- Edición diaria disponible desde las 5:00 am.
- Periódico del día en PDF descargable.
- Fotografías en alta resolución.
- Acceso a ediciones pasadas digitales desde 2010.