Lunes 21 de septiembre de 2015
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Luego de las campañas por el Sà o por el No, el deber de asistir a las urnas, obligatoriamente constituyó la responsabilidad ciudadana, es decir que sobre todas las cosas, la vocación democrática de más de tres millones de bolivianos en cinco distritos fue parte de otra sesión de gimnasia electoral.
Si influyeron las improvisadas campañas de rechazo o predominó la inusitada propaganda oficial de apoyo a establecer o no la vigencia de los estatutos autonómicos, lo sabremos en cuestión de horas más, quizás sumen dÃas, pero el desafÃo de llevar adelante los referendos se ha cumplido en su fase operativa, faltando tan sólo su cierre con resultados finales.
Tras la jornada cÃvica en la que se apreció un relativo movimiento ciudadano y por la información conocida predominó el ausentismo, quedan para el análisis las observaciones que se hicieron y que quizá no fueron tomadas en cuenta oportunamente para motivar una mayor respuesta de un electorado que en alto porcentaje desconocÃa el fondo de tener que emitir un voto por algo que resultaba intangible, sin la "fotito" para identificar al candidato. Se votó por "algo", según algunas personas por "una cosa" teórica y desconocida, para otras se jugó otra carta de prueba polÃtica con sentido oficialista o de rechazo a esa postura, aunque el TSE se encargó de separar, en el evento presente, cualquier ligazón de orden partidaria.
Fuente: LA PATRIA
