La contaminación visual es evidente en el centro de la ciudad de Oruro, por un lado los letreros de las tiendas de todo tipo que anuncian la presencia de algún negocio, y por otro, la maraña de cables que hacen parecer que el hombre araña estuvo por ahà "amarrando" la ciudad con sus telarañas compuestas por esas maromas.
Cuando una persona quiere tomar una fotografÃa de la ciudad, para mostrar algún tipo de atractivo como el monumento a la Virgen del Socavón, debe sortear los obstáculos visuales en los que se convierten los cables que se atraviesan de aquà para allá y viceversa.
Lo peor de todo es que algunos cables ni siquiera cumplen la función para la que fueron colocados, pues si uno deja de servir se mantiene clavado a los postes sin brindar beneficio alguno, y sólo causa contaminación visual.
Por otra parte, las compañÃas de electricidad, de telefonÃa y de televisión por cable continúan realizando nuevas instalaciones y la maraña se enreda aún más, dejando una imagen, de la ciudad, desagradable a la vista.
Quizás las autoridades municipales debieran regular el tendido de cables o brindar una solución más vanguardista, como ordenar que a partir de ahora se realice el tendido de cables subterráneos, como lo hacen en otras ciudades del mundo, donde no existe esa contaminación visual y resulta inclusive menos peligroso, ya que en tiempos de ventarrones los cables suelen desprenderse y pueden ocasionar más de un accidente.
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