Cuando se trata de justificar arreglos a problemas que se presentan en la fase de su aplicación, que puede ser de corto, mediano o largo plazo, se utiliza ese dicho popular "en el camino se arregla la carga", esperando que con sacudones, frenazos y otras alternativas, lo dispuesto con alguna prisa, alcance su acomodo ideal en un determinado espacio.
La referencia presente tiene que ver con el proceso de "socialización" que se cumple a toda máquina en varios distritos que buscan aprobar sus Estatutos Autonómicos en septiembre próximo, cuando los documentos no han pasado por la instancia de un amplio debate, sino simplemente por algunas discusiones entre partes de las asambleas departamentales, por supuesto con mayoría oficialista.
Se han dispuesto ciertos recursos a nivel del gobierno central para cooperar con las gobernaciones a fin de que éstas se encarguen de llegar a la mayor cantidad de personas con una serie de impresos, avisos en los medios de comunicación, no en todos, buscando el criterio ciudadano por el voto afirmativo de los estatutos.
Los estatutos orgánicos impresos que se distribuyen a los ciudadanos de cinco distritos, sólo sirven para que se conozca su redacción, pues no pasará de esa circunstancia cualquier observación que existiera, ya que no se abrirá ninguna opción para enmendar errores o añadir nuevos conceptos. El tiempo ya es corto para cualquier innovación, sólo se trata de leer y admitir lo hecho, así sea en contra de muchas voluntades.
Lo que ocurrirá en días más y en este mes constituirá un paso importante en el propósito político de establecer un modelo descentralizado con autonomías en los sub gobiernos nacionales, como parte de una estructura más práctica y objetiva de un Estado Plurinacional Comunitario.
Cómo funcionarán los estatutos, esa es la cuestión, entendiendo que no todo lo anhelado en las comunidades sociales está inscrito en lo que se puede llamar la Constitución o Carta Magna Departamental?y si no está inscrito ahora, eso significa que en algún momento tendrán que "abrirse los documentos" para su actualización, innovación o reformulación, de ahí aquello de que "en el camino se arregla la carga".
Pero más allá de esa apreciación es interesante el grado de evolución que implica configurar nuevas instituciones departamentales autónomas que apartándose del tutelaje centralista encararán un nuevo sistema administrativo para regirse en función del ingreso que represente por ejemplo, el manejo de sus recursos naturales de manera general, estableciendo prioridades para su explotación y priorizando la escala, magnitud y calidad de obras sociales de real beneficio comunitario, poniendo en segundo plano o liquidando los programas de maquillaje.
Las Gobernaciones complementarán su trabajo con las actividades de los gobiernos municipales autónomos, que ya ganaron esa condición desde 1985 y la reafirmaron 10 años después con la Ley de Participación Popular, pero que todavía no ejercen plenamente semejante alternativa de independencia y que en adelante tendrán ese reto de mejorar sus programas administrativos para que el pueblo sienta beneficios.
De momento las cartas están lanzadas, jugarlas de manera positiva y para lograr buenos resultados debe pasar por el voto ciudadano en los referéndums de este mes, más adelante significará adecuar cada estatuto al interés departamental, tomando en cuenta que no se trata de estatutos cerrados, lo que vendrá luego puede ser significativamente importante cuando se propongan los ajustes que correspondan para poner la carga en su lugar.
Fuente: LA PATRIA
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