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Jueves 27 de agosto de 2015

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Ecológico Kiswara

Editorial

La arborización en Oruro

27 ago 2015

Fuente: LA PATRIA

La arborización de Oruro fue un caro anhelo que tenían los habitantes de esta ciudad desde el año 1884, cuando fue puesto de manifiesto por el entonces presidente del Concejo Municipal, Adolfo Mier, sin embargo hacia 1900, tanto la plaza principal 10 de Febrero, como la conocida como del Regocijo, hoy "Manuel de Castro y Padilla", eran espacios desprovistos de vegetación.

Por esos años, muchos vecinos hicieron el intento de cultivar flores ornamentales y plantar árboles frutales en sus patios internos, algunos lo consiguieron y otros no, para llevar a efecto tal empresa, los orureños traían retoños desde Cochabamba, Sucre y Tarija.

No fue fácil para los orureños de esa época arborizar la ciudad, era un trabajo de mucho cuidado y el clima no siempre acompañaba la hazaña. Ese fue el impulso que requirieron las autoridades para lanzarse a realizar un experimento, entonces plantaron cebada en plena plaza principal.

Dicha acción causó más de una burla entre personas que llegaban a Oruro desde otros departamentos, originándose más de una graciosa anécdota, sin embargo, lo importante fue el resultado de la experimentación, pues se comprobó que el "árido" suelo orureño resultó ser adecuado para el crecimiento de vegetación.

Ese experimento fue un impulso para que en 1903, cuando presidía el Concejo Municipal el poeta José Víctor Zaconeta, se decidiera plantar arbolitos, lo cual también provocó la tomadura de pelo de algunas personas.

A partir de ese año, los orureños cuidaron con esmero sus árboles y continuaron trasladando más plantitas y arbolitos desde Cochabamba, hasta lograr lo que hoy es la ciudad, un lugar donde no digamos que abunda la vegetación, pero se pueden apreciar hermosos paisajes verdes, como la plaza de Armas, 10 de Febrero, la plaza "Manuel de Castro y Padilla", el sector del Colegio Anglo Americano, el parque "Ladislao Cabrera", en Agua de Castilla y otros.

Ahora que sabemos que a los habitantes de Oruro en los siglos pasados les costó mucho arborizar y mejorar el paisaje de esta árida y frígida tierra, quienes vivimos en la actualidad debemos ser cuidadosos, respetar y proteger los árboles, más si aún gozan de buena salud siendo antiguos, para que podamos heredar a las futuras generaciones un lugar además de agradable a la vista, que ofrezca calidad de vida a sus habitantes y visitantes.

Asimismo, en la actualidad contamos con tecnología muy avanzada y se puede continuar en la tarea de hacer de Oruro un verdadero edén.

Fuente: LA PATRIA
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