Miercoles 26 de agosto de 2015
ver hoy
La crisis económica en que vivimos y que agrava los males del Cuarto y Tercer Mundo, se ha convertido en una especie de desafío no solamente para los gobiernos sino para la población en general. Los tiempos de auge financiero han pasado y las "vacas gordas" de contar con mucho dinero se han convertido en "vacas flacas" que es preciso, ahora más que nunca, cuidar, para reasumir condiciones de fortaleza.
Vivir casi dispendiosamente por los excesos de dinero, siempre ha sido contraproducente en los países que no han tomado previsiones para su futuro; esto es, de alguna manera, lo ocurrido a las naciones de Latinoamérica que han vivido los auges de precios para las materias primas -petróleo y gas, especialmente para los países productores- y, de un momento a otro, han visto que todo cayó porque la comunidad internacional se enfrentó a nuevos cuadros de pobreza.
Para los países pobres y subdesarrollados como el nuestro, "el chupete dulce de precios altos" terminó; hoy, estamos frente a $us. 45.- por barril de petróleo y con la perspectiva de que pueda bajar algunos puntos; pero, las lecciones habidas tienen que haber calado muy hondo en la conciencia de gobernantes y gobernados; de otro modo, los problemas a enfrentar se harán muy duros.