El se帽or Presidente de la Rep煤blica se empe帽a en realizar un proselitismo anticipado con la esperanza, tal vez, de lograr una nueva reelecci贸n.
Conforme pasan los d铆as, don Evo Morales aprovecha muy bien, sus visitas a diferentes rincones del pa铆s para aleccionar a los pobladores buscando tener apoyo el 2020.
Para muchos ciudadanos, ese procedimiento presidencial, es una muestra de que el l铆der de los cocaleros, prioriza el aspecto pol铆tico, dejando a un lado el cumplimiento de sus obligaciones como Primer Mandatario.
Esa actitud es preocupante si se toma en cuenta que la situaci贸n econ贸mica del pa铆s tiende a bajar por efecto de las cotizaciones de minerales y el precio del gas y petr贸leo, que ya no son de alza, sino de permanente decremento.
Esta realidad es compartida por el propio gobierno, cuando se anuncia ejecutar recortes presupuestarios provenientes del impuesto directo de los hidrocarburos, lo cual afectar谩 seriamente a la realizaci贸n de programas de desarrollo social, especialmente de proyectos de inter茅s departamental.
A su vez, el sector empresarial, alerta que de no darse cabida a la libre iniciativa privada, quedar谩 trunca la idea de fomentar el emprendimiento productivo, corriendo el riesgo de ingresar a una especie de empobrecimiento.
De otro lado, varios analistas financieros, estiman que se debe preservar el capital humano como fuerza motriz del desarrollo y no hacer que el mismo se vea desalentado o en la calle por imponerse resoluciones catastr贸ficas como los aumentos salariales discrecionales, provocando la destrucci贸n de empleos.
En tal virtud, si realmente los bolivianos queremos mejores y mayores r茅ditos econ贸micos, debemos pedir al Poder Ejecutivo actu茅 con responsabilidad y no ejecutar el populismo paternalista, provocando el aumento de la deuda p煤blica como paso previo a la descapitalizaci贸n.
Sobre lo anterior, a nivel de Sudam茅rica, ya existen evidencias claras de degradaci贸n econ贸mica que est谩n poniendo en peligro la estabilidad democr谩tica.
Ese es el caso de Brasil, que hasta hace poco era considerado como una potencia econ贸mica en el mundo, ahora se debate en una tremenda crisis, al extremo de que la poblaci贸n brasile帽a, exige la renuncia de la se帽ora Dilma Rousseff.
Similar situaci贸n pasa en Venezuela, donde han desaparecido los alimentos de primera necesidad, siendo algo dram谩tico, ver por televisi贸n largas colas en busca de comida y escuchar a las amas de casa decir: "Aqu铆 no hay nada de nada".
Ojal谩 Dios no permita que nosotros lleguemos a esos extremos, esperando que el Jefe de Estado recapacite y administre correctamente los intereses nacionales, sin dejarse llevar por el deseo intenso de perpetuarse en el cargo, algo que no es digno de un verdadero dem贸crata.
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