Pueblos indígenas, científicos y expertos analizarán causas del cambio climático

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Desde el venidero 20 al 22 de abril, Cochabamba será la sede de la Conferencia Mundial de los Pueblos sobre los Cambios Climáticos y los Derechos de la Madre Tierra, estará estructurada en 17 grupos de trabajo en base a temáticas definidas con el principal objetivo de analizar las causas estructurales y sistemáticas que provocan el cambio climático y proponer medidas de fondo que posibiliten el bienestar de toda la humanidad en armonía con la naturaleza.

Los temas que serán abordados son: Ciencia y Cambio Climático, Causas estructurales del Calentamiento Global, Armonía con la Naturaleza, Derechos de la Madre Tierra, Tribunal de Justicia Climática, Deuda Climática, Migrantes Climáticos y Referéndum Mundial de Pueblos sobre el cambio.

El primer grupo de trabajo lleva el nombre de: Causas Estructurales del Cambio Climático, que quizá sea el punto principal de este evento internacional.

La catástrofe es un acontecimiento inesperado, inhabitual y extraordinario que genera durante un tiempo, una desproporción o desequilibrio en el clima y la madre tierra. Por lo tanto una catástrofe será un suceso inesperado que se instaura de forma rápida, que afecta a un sector de la población, que produce importantes destrozos, tanto físicos como humanos, que supone una desproporción entre necesidades y medios de auxilio y que obliga a la intervención de medios extraordinarios, siendo estas dos últimas, las características fundamentales de una situación de que podemos denominar “catastrófica”.

Por lo general los desastres como los terremotos urbanos tienen una consideración especial ya que por la densidad de población, el hacinamiento de ésta, las superestructuras y las redes de comunicación producirán mayor número de víctimas y damnificados que las que se pueden lamentar en un entorno rural, así como las estrategias para su resolución serán más complejas.

Hoy estamos viviendo en los polos norte y sur un desastre de la naturaleza aún desconocido, los movimientos de los glaciares, que en los últimos 50 años se han transformado en la causa más importante del cambio climático. Los glaciares, esos gigantes de hielo de la región austral de la Argentina y de Chile perdieron un 5% de sus 17.500 kilómetros cuadrados de extensión. La revolución industrial ha mejorado sin duda nuestra esperanza y nivel de vida, pero son incontrolables los huracanes o tsunamis y se suceden más comúnmente de los que quisiéramos, por tanto el planeta tierra es mucho más importante para la humanidad.

El obtener un mayor rendimiento de la energía, así como el utilizar energías renovables, produciría una disminución del consumo de combustibles fósiles y, por lo tanto, de nuestro aporte de anhídrido carbónico a la atmósfera. Esta prevención también incluiría la reforestación, con el fin de aumentar los medios naturales de eliminación de anhídrido carbónico. En cualquier caso, lo importante es ser conscientes de cómo, en muchas ocasiones, nuestras acciones individuales tienen influencia tanto sobre la atmósfera como sobre la habitabilidad del planeta.

Fuente: LA PATRIA