Un acuerdo firmado en junio pasado entre representantes de nuestro país y del Perú consigna la venta de Gas Licuado de Petróleo (GLP) de procedencia boliviana inicialmente al mercado de la ciudad altiplánica de Juliaca, que ya comenzó a recibir una dotación de 10 mil garrafas diariamente.
El acuerdo establecido a través de las empresas Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB) y Petroperú respectivamente, definirá otras estrategias para la ampliación del acuerdo preliminar y la política de precios, aspecto que no aclaró el Ministro de Hidrocarburos y Energía, como tampoco lo hizo su colega peruana a tiempo de confirmar ambos la vigencia del negocio de GLP boliviano a un sector del altiplano peruano.
Antes del acuerdo varias poblaciones próximas a la frontera Perú - Boliviana se nutrían del GLP en garrafas que eran introducidas vía contrabando por la ruta del Desaguadero, constituyendo el hecho un negocio de magnitud, para comerciantes de ambos países, pues los precios que manejan los "rescatistas de gas" en nuestro país ya tenían un sobreprecio considerable al que se sumaba la utilidad de distribuidores en suelo peruano, situación que de pronto cambia en esa zona por la venta directa y oficial de YPFB, de 10 mil garrafas de GLP a Juliaca, la localidad más próxima a la frontera.
En materia de precios se aplican algunas modalidades especiales y en función a los tratados internacionales se aplican montos específicos, como por ejemplo se menciona que en el convenio con Petroperú se toma en cuenta el "marcador internacional" para el carburante (GLP), indicando que su precio base es de 210 dólares por tonelada, sin embargo YPFB obtendrá hasta 470 dólares por la misma tonelada pero operando como distribuidor. En todo caso el valor simplificado a una garrafa de 20 kilos, resulta más barato que comprando del contrabando.
Casi similar operación ya concretada con el Perú se está considerando con técnicos de la empresa petrolera de Paraguay, que recientemente estuvieron en Santa Cruz, intercambiando detalles de lo que podría significar - en breve - la exportación de GLP al mercado paraguayo, ampliándose de tal modo nuestras ventas de gas licuado a mercados vecinos y en condiciones que cubren las expectativas de los ejecutivos de la petrolera boliviana.
Un justificativo para estas operaciones, según el titular de hidrocarburos y energía, es la caída de los precios del petróleo en el mercado internacional y la incidencia negativa de ese proceso en la economía nacional, lo que ha obligado a tomar decisiones especiales para exportar el GLP boliviano, cuya producción según se explicó está en los volúmenes óptimos de cobertura a la demanda interna y con un margen apropiado para la exportación a nuevos mercados, caso del Perú y casi con seguridad al Paraguay.
Se aclara que en la estrategia de YPFB se considera favorable la modalidad de acordar con las petroleras vecinas la distribución de GLP en sociedad con firmas estatales, inclusive de Argentina, Perú y Paraguay, de modo que los ingresos para el erario público nacional serán mayores que los que genera la simple exportación.
Los expertos en este tipo de acuerdos, observan con cierto escepticismo, el anuncio de los acuerdos referidos, pues no se ha informado oficialmente sobre el verdadero volumen de producción de gas en el país y fundamentalmente las seguridades de abastecimiento del GLP para el mercado interno, tomando en cuenta que en la mayoría de ciudades y localidades rurales el gas licuado es artículo de primerísima necesidad, mientras la cobertura del gas natural todavía no ha cubierto toda la demanda nacional, por lo mismo la cantidad de garrafas resulta insuficiente en épocas de alto consumo.
Fuente: LA PATRIA
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