Jueves 16 de julio de 2015
ver hoy
Las huestes masistas se frotan las manos y saltan de alegría al ver que tienen asegurada una nueva reelección de su jefe en la Presidencia de la República para el 2020, con la posesión del nuevo Tribunal Supremo Electoral.
Jerarcas de ese conjunto de partidarios de don Evo Morales, consideran tener el sartén por el mango para llevar adelante el proceso que permita continuar en el Poder por otro quinquenio.
Esa clase de postura evidencia que lo acontecido en el TSE, es más de lo mismo, al contar entre sus componentes una mayoría de personas que comparten con la ideología totalitaria del Movimiento Al Socialismo.
Tienen la seguridad de que el paso político a dar, estará fortalecido cuando se de vía libre al detalle que falta, o sea el cambiar a los integrantes de los tribunales departamentales electorales, con figuras nuevas que preparen el andamiaje para que don Evo Morales siga escalando peldaño a peldaño, y cumplir su anhelo de ser el eterno gobernante de Bolivia.
Entonces, el pueblo debe preocuparse para rechazar contundentemente estos aprontes masistas que dañan los preceptos democráticos del país que es afecto a la sucesión gubernamental dentro el marco institucional de respeto a la Constitución Política del Estado.
