Desde hace más de un siglo, el estudio, desarrollo, alcance y efectos de las políticas públicas despertaron la inquietud en la administración de los Estados con el fin de que, a partir de bases científicas, la gestión de las organizaciones públicas pueda ser más eficaz y eficiente.
Ya desde principios del siglo XX en Bolivia se identificó la problemática de los niños y niñas que perdieron el cuidado parental, siendo la respuesta la atención institucional privada y/o religiosa de carácter filantrópico. Hasta mediados de la década de los ´30, el problema empieza a visibilizarse en las agendas públicas y de gobierno debido al incremento de casos de abandono y orfandad infantil provocados por la Guerra del Chaco.
En 1937 se firma el Decreto Supremo 14-06-1937 que crea el Patronato Nacional de Menores para "ejercer la tutela del Estado en favor de la infancia y menores en general, especialmente de los niños abandonados" (República de Bolivia, 1937). En última instancia, el Patronato Nacional de Menores, como entidad pública, implementó la Política de Atención a la Niñez en Situación de Abandono a través de hogares estatales.
En más de siete décadas de funcionamiento de los hogares del Estado existieron varias reformulaciones a la política pública de atención a la niñez que perdió el cuidado parental, como lo demuestran las actualizaciones del Código Niña, Niño, Adolescente realizadas en 1966, 1975, 1991, 1999 y 2014, que buscaron promover y garantizar los derechos de la niñez como una respuesta que busca un desarrollo adecuado.
Continuamente distintos actores sociales, entidades públicas u organizaciones de la sociedad civil buscan reformulaciones para que una política pública responda de mejor manera a sus intereses y problemáticas particulares. Esta búsqueda de modificaciones y mejoras se denomina incidencia o abogacía.
Sin embargo, no existe una sola definición de abogacía. La mayoría de las organizaciones define la abogacía en función a su área de trabajo y actores involucrados. A partir del ´90, el involucramiento de actores de la sociedad civil en la abogacía aumentó considerablemente, llegando a generar críticas sobre la legitimidad de las propuestas de cambio que se presentan debido al reconocimiento de los riesgos generados en los procesos de abogacía cuando no se conoce a profundidad el contexto y la realidad local de las personas vulnerables por las que se aboga.
En el caso de la infancia en riesgo de quedar sin la protección de sus familias, el trabajo de abogacía no debería definirse sólo como una concienciación respecto a la situación y derechos, sino más bien en aquellas alternativas de desarrollo diario que otorgamos para que esos padres y madres que pensaron en el abandono como única solución a las crisis que enfrentaban, se conviertan en personas que al superar las más difíciles batallas personales, se convencieron de que la abogacía se hace a diario, motivando y convenciendo a más personas de invertir recursos económicos, tiempo y esfuerzos en la infancia.
Para tus amigos:
¡Oferta!
Solicita tu membresía Premium y disfruta estos beneficios adicionales:
- Edición diaria disponible desde las 5:00 am.
- Periódico del día en PDF descargable.
- Fotografías en alta resolución.
- Acceso a ediciones pasadas digitales desde 2010.