La psicóloga responde

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Hace seis meses que me enteré que tengo cáncer, mi esposo ya lo sabe. No sé como decírselo a mis tres hijos que son pequeños. Uno tiene 9 años, la que le sigue 7 y mi ultimita 5.

Tengo muy poco tiempo de vida. Me da miedo a veces de sólo pensar que me voy a morir y ya no podré verlos ni me podrán ver.

Hablo todas las noches con mi esposo sobre todo lo que tiene que hacer cuando yo ya no esté.

Hace unos dos meses que voy haciéndoles hacer cosas a mis hijos para que sean más independientes, desde cepillarse bien los dientes hasta cumplir con sus obligaciones en la escuela??

Ayúdeme por favor, ¿Cómo debo proceder? ¿Qué debo decirles?

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Querida amiga:

Es difícil pensar sobre la muerte, y lo que pasará después de ella. Sin embargo en cierta forma puede ser una ventaja el hecho de saber cuándo uno ya no estará aquí en este mundo.

Qué bueno que tengas el apoyo de tu esposo. Para él debe ser también una circunstancia muy difícil.

Con los niños es un poco más delicado, pues dependiendo el nivel de apego que ellos tengan contigo, tomando en cuenta su edad y la tolerancia a la pérdida que sufrirán, ellos superarán el dolor y la tristeza.

Prepárate para hablar con tus hijos con la ayuda de tu esposo, hablándoles primero sobre tu enfermedad, interactúen con ellos, tomando en cuenta su edad, para explicarles la situación en la que estás y en la que ellos se verán, háblenles de la muerte, no como si fuera algo feo o malo, sino mostrándoles que es algo lleno de paz.

Demuéstrales mucho tu cariño a partir de ese momento, no tengas miedo de hacerlo, ellos acumularán buenos y felices recuerdos de su mamá.

Lo mismo con tu esposo, disfruten más del tiempo juntos, disfruta a tu familia, no con tristeza, al contrario con mucha felicidad y amor, esto es aprovechar el tiempo, el espacio y el lugar, disfrutar de la vida y de la familia. Sé agradecida.

Tu despedida será mucho más significativa, constructiva y gratificante que de aquella persona que repentinamente se va sin decir nada, como aquellos que fallecen por accidente por ejemplo.

Se tiene miedo a la muerte pues dejamos de respirar, de ser consientes, de sentir. Y esto asusta a cualquiera, pues si toda nuestra vida hemos respirado el aire y sentido los latidos de nuestro corazón. Dejar de hacerlo es desesperante.

Es muy natural tener miedo a la muerte, puede ser posible que el resto de tu familia lo tenga también, por diferentes motivos, sin embargo si has estado conversando con tu esposo cada noche, es un buen momento para apoyarse y no estigmatizar la muerte.

Pues es un paso y como seres vivos todos llegamos a lo mismo. Es una etapa natural en la vida.

Ten la certeza de que el apoyo que te demuestra tu esposo y tus familiares se transformará posteriormente en apoyo mutuo y que tu familia estará en buenas manos.

Cuando la gente esté a tu alrededor no tengas pena, siéntete feliz pues es una respuesta al amor que tú has sembrado.

Si ni tu o/y tus familiares no encuentran el sosiego, será bueno que reciban apoyo profesional de un psicólogo, ya sea antes o después del momento.