Domingo 17 de mayo de 2015
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En la medida en que se acorta el tiempo para posesionar a las nuevas autoridades hay preocupación en algunos distritos, porque no se estaría cumpliendo un proceso necesario de transición que implica no sólo dejar las oficinas en orden, sino también los papeles y ésta parte es la más importante, ya que permitirá a las nuevas autoridades tomar conocimiento de lo hecho y mantener un seguimiento de todos los proyectos y trámites que no deben ser retrasados o paralizados.
Lo que sucede generalmente es que las autoridades salientes terminan su gestión y abandonan los despachos con sus efectos personales, sin dar cuenta y razón de las actividades que cumplen hasta el último día de su gestión, actitud por demás perjudicial porque obliga al nuevo funcionario a “comenzar” todo de nuevo y eso significa una lamentable pérdida de tiempo.
Todas las autoridades departamentales y municipales electas en marzo pasado han recibido de sus tribunales electorales departamentales sus respectivas credenciales que los habilitan para el ejercicio de las funciones en los cargos a los que se postularon y lograron cierto respaldo ciudadano, hay que decirlo, no siempre de mayoría absoluta, sino de relativa ventaja sobre los contendores, inclusive de dudosa validez, como el caso de Oruro, en que la cantidad de los votos blancos, también válidos, superaron a los votos políticos.
Fuente: LA PATRIA
