Justicia divina no manipula leyes para amedrentar y perseguir
22 mar 2010
Fuente: La Paz, 21 (ANF).-
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Monseñor Sergio Gualberti en la homilía dominical en la Catedral de San Lorenzo Mártir, en la ciudad de Santa Cruz, hizo una analogía de la justicia divina que no es como la de los hombres que manipula las leyes y que busca amedrentar y perseguir a sus adversarios.
“Que diferente sería la justicia humana, si es que actuara como la justicia divina, evitando la manipulación de leyes e instituciones judiciales que instrumentaliza a la justicia con segundas intenciones que la utiliza para amedrentar y perseguir a adversarios o para desprestigiar a las personas”, dijo Gualberti en la homilía dominical en la Catedral de San Lorenzo Mártir, en la ciudad de Santa Cruz.
La reflexión se hizo en la interpretación de la biblia que este domingo nos habla del evangelio de la adúltera, a quien en las Santas Escrituras se narra que es condenada a lapidación por el sistema legalista de la interpretación farisea de la ley en una sociedad patriarcal y machista, es la ocasión para revelar una vez más la novedad del Dios de Jesús: Un Dios que no condena a los pecadores, sino sólo al pecado, y por eso los salva siempre redimiéndolos del pecado.
Jesús se encuentra con la mujer condenada por adulterio y, sin mediar ningún tipo de petición ni de iniciativa por parte de ella, le concede el perdón gratuito, la amnistía radical, el indulto general. La mujer no ha hecho todavía nada positivo, pero, además de ser pecadora, como todos de un modo u otro, es una víctima a todas luces.
“Jesús no avala el pecado, condena siempre el pecado pero tiene otra actitud con los pecadores a los que ama y perdona. El perdón de Dios en la mejor medicina que rehabilita ya que al ser libres de pecado y experimentado la Pascua, y la resurrección del señor podemos iniciar una nueva manera de vivir”, dijo el obispo auxiliar de Santa Cruz.
Jesús quiere que cada uno se pregunte a sí mismo si tiene derecho a juzgar siendo pecador, necesitado de conversión y perdón antes que cambien los demás, si está dispuesto a transformarse ya que las cosas cambian si es que cada uno los hace sin esperar que los otros lo hagan.
Cristo quiere dejar en claro que el juicio de Dios sea de este y no de los hombres, un juicio basado en la verdad y sólo Dios la conoce ya que escudriña nuestro corazón y cada una de las intenciones de su pueblo. La biblia deja entender que Jesús con sólo algunas palabras logra dejar atrás a todo aspecto legal e involucrando a quienes lo interrogaban y con las palabras los golpea más duramente que las piedras con las que se pensaba matar a la mujer.
Cuando Jesús se encuentra de frente, muestra a la humanidad con el pecado y Jesús con la redención y la salvación, la miserable y la misericordia, donde Dios ama a las personas sin antes pedir la conversión y esta es la novedad de la que las lecturas nos hablan.
Monseñor nos pide que no perdamos la oportunidad de ser perdonados, por eso se debe acercar a Dios con gozo para poder iniciar una vida nueva en Cristo resucitado en Pascua, que es otro regalo que Dios da a cada uno de nosotros.
Fuente: La Paz, 21 (ANF).-
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