Relaciones humanas en la Policía Boliviana “trato cordial y respetuoso al público”

La profesión de policía es en relación a otras, la que más interactúa con las personas, por tanto el trato hacia las mismas debe ser respetuoso, considerado y cordial en todo momento.

Mencionemos algunas recomendaciones de normas de trato al público, extractadas de nuestra propia experiencia y que se pueden adecuar a todos los espacios de servicios policiales.

El policía debe comuníquese con las personas a las que sirve, utilizando un lenguaje amable y cordial. ¡Recordar siempre los principios de la comunicación!

Debe ser respetuoso absolutamente con todas las personas, sean quienes sean. ¡No discriminar absolutamente a nadie!

Debe meditar bien su expresión y sus palabras antes de hablar. ¡Jamás humillar a las personas!

Saber escuchar con atención a su interlocutor por más que éste sea ocasional. ¡Considerar las opiniones de los demás!

Prestar especial atención a los niños, ancianos, mujeres embarazadas, personas con capacidades diferentes y enfermos. ¡Pensar siempre que son nuestra prioridad!

Respetar los secretos y confidencias de la profesión, este detalle hablará muy bien de su formación personal y profesional. ¡Caso contrario empañará su imagen!

Jamás incomodarse con las preguntas y opiniones de la gente que recurre a usted, pues el policía está al servicio de todos y en todas las circunstancias de la casuística policial. ¡Sea siempre considerado y tenga mucha paciencia!

Cuando tenga alguna limitación, duda o desconocimiento sobre cualquier consulta de las personas o en relación a algún procedimiento policial, no pensar más, pedir disculpas en forma sincera y recurrir con premura consultando sobre el tema a algún camarada. ¡Esa actitud será considerada muy honesta!

Si se tiene problemas personales o familiares, dejarlos fuera del trabajo, hacer un esfuerzo y aparentar no tenerlos. ¡Muy difícil para el ser humano policía, pero con esfuerzo se lo puede lograr!

Finalmente como policías de bien, debemos asumir siempre la responsabilidad de todas y cada una de nuestras acciones. ¡Jamás busquemos otros responsables!

“El policía debe tener siempre una frase amable en toda circunstancia de servicio a las personas”.

(*) Componente de la Promoción 1984 de la Anapol